Al día siguiente que se acabe el plazo de 20 días fijados por el Tribunal Supremo para que el MNAC entregue a Aragón las pinturas murales de Sijena que desde hace décadas protege, el gobierno de Aragón reclamará el viernes la ejecución forzosa de la sentencia que condenaba al Museu Nacional d'Art de Catalunya a devolver las pinturas al Monasterio de Villanueva de Sijena, en Huesca. Según informa la ACN, el escrito se enviará de forma telemática en el juzgado oscense, que es quien tiene que hacer cumplir la sentencia tras la ratificación del Supremo. El mismo viernes, el presidente de Aragón, Jorge Azcón, comparecerá al pleno de las Corts, donde está previsto que se refiera a esta situación.
Desde un primer momento, el líder del PP aragonés ha reclamado que se cumpla la sentencia y que las pinturas murales de Sijena, que son un gran tesoro del románico con un enorme valor patrimonial y artístico, sean devueltas al monasterio. En los últimos días, sin embargo, todavía ha subido más el tono. Este martes, sin ir más lejos, aseguró que el traslado se haría "de grado o a la fuerza", después de que el MNAC presentara el lunes la petición de un incidente de ejecución, alegando la incapacidad técnica para hacer el traslado. Son muchas las voces expertas que advierten que las obras no se pueden mover y devolver al monasterio sin que eso implique estropearlas. "El gobierno de Aragón ha tratado de colaborar, de ser leal, pero cuando ayer conocimos que, aunque trabajemos de manera conjunta [con el grupo de trabajo constituido por todas las partes], lo que hacen es pedir al juzgado la imposibilidad de ejecución de la sentencia, nos sentimos engañados", manifestó. Hace una semana el gobierno aragonés accedió a formar parte del grupo de trabajo, tal como había propuesto el Patronato del museo, pero ya ha retirado a los técnicos que había propuesto, al considerar que la incidencia de ejecución se había presentado en unos términos "inaceptables".
El aviso de unos abogados ante los posibles daños
Por otra parte, un colectivo de abogados de Osona, la Associació d'Advocats d'Osona per la Defensa dels Drets Humans, ha enviado un burofax al Patronato del Museu Nacional d'Art de Catalunya y al Departament de Cultura para advertirlos de las consecuencias penales que podría suponer someter las pinturas de Sijena a un retorno sin atender los avisos técnicos que lo desaconsejan. Los abogados están preocupados por los posibles daños o la destrucción que se podría causar en las pinturas y remiten al artículo 323 del Código Penal. A través de un comunicado, la asociación recuerda a las autoridades que tienen "el deber legal" de proteger el patrimonio cultural. En caso de que se trasladen las obras, y si se comete delito contra el patrimonio, presentarán una querella criminal contra el museo y el departamento.