La alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, ha respondido al delegado del gobierno español, Enric Millo, que los miembros de su equipo no harán "homenajes" a aquellos que los "zurraron". Millo ha acusado este martes a Madrenas de tener una actitud "sectaria" con los representantes del gobierno español y "presionar" entidades de la ciudad para boicotear su presencia en actos organizados en la ciudad.
El último episodio se habría producido el jueves en el Fontajau en el marco de un partido del Eurolagar entre el Spar Citylift Girona y el Olympiacos. El subdelegado del gobierno, José Manuel Sánchez-Bustamente, se marchó del acto después de que le anunciaran que el resto de miembros que se tenían que sentar en el palco se cambiarían de asiento si él se sentaba.
Madrenas ha admitido la situación pero ha negado que se haya pedido a ninguna asociación que impida o "prohíba" la entrada a miembros del gobierno español. "El señor Millo miente una vez más", ha dicho. La alcaldesa ha remarcado que Bustamante tenía un asiento asignado y que si se marchó fue para "evitar la vergüenza de tener que sentarse solo". En este sentido, ha dicho que están en su "derecho" de sentarse donde quieran y que en ningún caso compartirán espacios con aquellos que ejercieron "violencia" el pasado 1-O.
"Nosotros acordamos que desalojaríamos cualquier espacio si ellos estaban porque queremos mostrar que estamos en absoluto desacuerdo con lo que pasó, especialmente el 1-O", ha dicho. Madrenas ha remarcado que nunca ha recibido ninguna llamada de representantes estatales para saber cómo están "las víctimas de las agresiones" y ha afirmado que ni la subdelegación ni la delegación del gobierno español en Catalunya les informaron de que "habían dado carta blanca a la policía para venir a apalearnos".
"Todavía esperamos también que se nos diga por qué han puesto las garras en nuestras instituciones o por qué han aplicado el 155 que tiene efectos sobre todos los ciudadanos de Girona", ha insistido. "Lo que no es aceptable es que dejen pasar el tiempo, estén desaparecidos, nieguen lo que pasó y todavía se piensen que los representantes públicos les rendiremos homenaje", ha dicho.
"No pensamos hacer homenajes a aquellos que nos zurraron", ha asegurado. En este sentido, ha dicho que mantendrán este posicionamiento hasta que el Estado español "pida disculpas" y "deje que las comisiones para investigarlo tiren adelante". "Hasta que no haya libertad y recuperemos los derechos, me seguiré negando a sentarme a su lado", ha insistido.