Jornada de movilización del mundo local este sábado en el Paraninfo de la Universidad de Barcelona, donde más de 500 alcaldes se han comprometido con el referéndum del 1 de octubre. En un acto organizado por la Associació de Municipis per la Independència (AMI) y la Associació Catalana de Municipis (ACM), el mundo municipal ha apoyado al Govern de la Generalitat con una declaración en que se comprometen a "colaborar en todas aquellas actuaciones que desde el Govern se les requiera, y, por eso, en el momento en que se haga la convocatoria, pondrán a disposición de la organización del referéndum los locales habituales donde se celebran todas las contiendas electorales en nuestros municipios".

El acto ha contado con la presencia del president de la Generalitat, Carles Puigdemont, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, el vicepresident de la Generalitat, Oriol Junqueras, y consellers y diputados.

En su parlamento, Puigdemont ha agradecido el compromiso de los alcaldes y ha declarado que no tiene ninguna duda de que "los ciudadanos de sus municipios hoy se ven reflejados en ellos". Sin embargo, Puigdemont ha pedido a los alcaldes que continúen firmes durante los tres meses que quedan para la culminación del procés, a pesar de las amenazas del Estado: "Contra el Estado de miedo, el Estado de esperanza y el Estado de derecho".

En este sentido, Puigdemont ha criticado duramente las tácticas y acciones del Gobierno español para detener este proceso, del cual ha recordado que en unos inicios "hacían mofa" pero que ahora tienen "miedo" y por eso "amenazan", porque ven que "va de verdad".

El president de la Generalitat ha dejado claro que el Gobierno del PP "se piensa que lo tiene todo: tienen muchos jueces, mucha diplomacia, muchos lobbies, grupos de comunicación, cloacas, pero les falta lo más importante, la gente". En esta línea, ha recordado que la ciudadanía es la gran protagonista del procés, ya que es un "movimiento que va de las personas a las instituciones". Puigdemont ha terminado su discurso con un mensaje claro dirigido a todos aquellos que niegan que se vaya a celebrar el referéndum: "O polillas o urnas, votaremos"

Por su parte, Junqueras ha dejado claro que solo hay una legalidad y una legitimidad vigentes, la de ejercer el derecho a la autodeterminación y la de escuchar la voluntad de la gente. En un discurso breve, Junqueras ha tenido palabras para el Estado español, del que ha criticado que "no quiere escuchar a la gente".

Además, Junqueras ha hecho referencia a la judicialización del procés que está llevando a cabo el ejecutivo de Mariano Rajoy y ha pedido unidad a los ciudadanos para hacer frente a las amenazas, "tenemos que actuar de forma masiva y colectiva, porque así el Estado lo tiene mucho más difícil para actuar", ha declarado.

Movilización del mundo local

Los protagonistas del acto han sido los representantes del mundo local, a pesar de que ha habido bajas importantes como la de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que no ha participado en el acto y tampoco lo ha hecho ningún miembro de su Gobierno.

Quien si que ha reafirmado su compromiso con el referéndum ha sido la presidenta de la Associació de Municipis per la Independència y alcaldesa de Vilanova i la Geltrú, Neus Lloveras, que ha dejado claro que este compromiso se debe a la "responsabilidad que tienen con los ciudadanos que los votaron". En este sentido, Lloveras ha avisado al Estado de que "no tirarán atrás" y ha recordado que si hasta ahora "los más de 400 ataques del Estado a los ayuntamientos no los han conseguido parar, no lo hará nada a partir de ahora".

Además, Lloveras ha adelantado que desde la AMI "se ha propuesto a los municipios hermanados que durante el referéndum vengan a Catalunya a hacer de observadores".

Por su parte, el presidente de la Associació de Municipis de Catalunya, Miquel Buch, ha querido agradecer el trabajo que han hecho y están haciendo desde el Govern y el Parlament catalán para que el referéndum salga adelante. Buch ha afirmado que "la ciudadanía está detrás de ellos pero que en tres meses, el día del referéndum, estará a su lado, en las urnas".

Buch, como Lloveras, también ha tenido palabras para el Gobierno de Mariano Rajoy, a quien ha pedido que busque en el diccionario de donde proviene la palabra democracia y verá que no quiere decir "fidelidad al Gobierno del PP".

El acto también ha contado con parlamentos de diferentes alcaldes catalanes, como el alcalde de Sabadell, Juli Fernández, y la alcaldesa de Berga, Montse Venturós, que han expresado la "voluntad y la responsabilidad del mundo local" y que por eso "pondrán las urnas el próximo 1 de octubre, ya que "se deben a sus vecinos". En este sentido, los alcaldes son conscientes de que de cara a la celebración del referéndum "hay mucho trabajo por hacer, pero lo harán, y lo harán bien".

Aparte de mostrar su apoyo, los representantes del mundo local han pedido a la Generalitat que "allí donde no lleguen los alcaldes tendrá que llegar el gobierno del país".

En el documento, los alcaldes también plantan cara al Estado y avisan de que "no retrocederán ante ningún obstáculo político, jurídico o de cualquier índole que pueda articular el Estado en contra de la celebración de este referéndum". De hecho, ante las amenazas del Gobierno español, los alcaldes han dejado claro que no se echarán atrás, "si siempre hiciéramos caso a la ley, hoy las mujeres no podrían votar", una afirmación que ha arrencado los aplausos del público.