El alcalde de Mollerussa, Marc Solsona, ha sido el primero de los alcaldes aforados en comparecer delante de la Fiscalía Superior de Catalunya. Solsona se ha negado a declarar y también a firmar el acta porque el fiscal José Joaquín Pérez de Gregorio no ha dejado que explicara los motivos por los que no quería declarar.

Como han hecho los otros dos alcaldes que han declarado hoy en La Seu d'Urgell, el de Oliana y el de El Pont de Suert, Marc Solsona tampoco ha querido declarar ante el fiscal. El alcalde de Mollerussa ha comparecido de forma voluntaria, pero no ha querido responder a las preguntas del fiscal. En caso de que no se hubiera presentado, habría sido detenido, tal como mandó el Ministerio Público cuando dio la orden de citar a todos los alcaldes, más de 700, que se han puesto al lado del Govern de la Generalitat para facilitar el referéndum.

A las puertas de la Fiscalía, un centenar de personas que han venido de Mollerussa han apoyado a su alcalde, junto con la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y los miembros de la Mesa que están imputados por varias querellas a raíz del referéndum.

La comparecencia de Solsona ante el fiscal ha durado media hora, a pesar de que el alcalde de Mollerussa se haya negado a declarar. Las formalidades antes de empezar y las del final han ocupado el tiempo dentro de la sala, donde solo se ha formulado una pregunta: Si el alcalde quería declarar. Ante su negativa, el fiscal ha ordenado la redacción del acta y ha ofrecido a Marc Solsona no firmarla si no estaba de acuerdo.

José Joaquín Pérez de Gregorio ha iniciado la comparecencia en castellano y ha alertado a Solsona de que siguiera en esta lengua, porque todo hacía pensar que el caso acabaría en la Fiscalía General del Estado y así se ahorrarían el trámite de la traducción posterior.