Ante un auditorio del CCCB lleno hasta los topes y con una fuerte expectación, el activista de Hong Kong Jason Y. NG se ha dispuesto a dar una lección magistral a los catalanes independentistas sobre los procesos revolucionarios a través de la desobediencia no violenta. Jason Y. NG, que justamente esta semana visitó al presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, en Lledoners, ha querido hacer un resumen de los motivos de la revolución pro-democracia de su país y del proceso que los ha llevado desde la revolución de los paraguas de 2014 hasta la actualidad, pero también dar tres consejos al público para aplicarlo a Catalunya.
Según el activista y líder de la revolución contra China, en un proceso de este tipo "el aliado más importante es la comunidad internacional" y, por lo tanto, hace falta buscar su "apoyo" y hacer que sea la batalla de "David contra Goliat". También ha defendido que, paralelamente a darse a conocer internacionalmente, hay que crear "grupos de presión internacionales" que busquen el apoyo de los Estados y de las cámaras legislativas internacionales. Finalmente, como tercera lección, ha subrayado la importancia de la tecnología como una manera de autoogranitzarse sin líderes visibles y de "manera democrática".
Por otra parte, Jason Y. NG. ha defendido que es "importante que el movimiento no sea violento", a pesar de reconocer que no es "fácil", ya que "hace falta mucha paciencia" y "cuesta salir a la prensa" si no hay violencia porque esta es "muy sensacionalista". Sin embargo, ha defendido que hay que buscar nuevas manera" de protesta imaginativas, y ha puesto como ejemplo las cadenas humanos luminosas. "Es una manera inteligente de recuperar la atención internacional", ha añadido.
Lecciones de Hong Kong de 2014 a la actualidad
Más allá de Catalunya, también ha querido explicar las "lecciones" que los activistas de Hong Kong han sacado desde la protesta de 2014 con la revolución de los paraguas hasta la actualidad, y ha destacado que también pueden servir aquí. En este sentido, ha puesto como principal ejemplo que con el avivamiento de las protestas el año 2019 decidieron taparse las caras y tuvieron líder para evitar que les pudieran arrestar con tanta facilidad. También que ampliaron el uso de la tecnología y evitaron ocupaciones de espacio público porque, ha destacado, el gobierno al final se "acostumbra" y puede lidiar más fácilmente con ello. Por eso, ha explicado que se optó por acciones más "imprevisibles" y "fluidas".
En este punto, ha sido cuando ha hecho una mención al Tsunami Democràtic, que hizo una acción parecida con la protesta del aeropuerto del 14 de octubre pasado.
También ha destacado que el año 2014 hubo una división muy fuerte dentro del movimiento pro-independentista de Hong Kong entre los que optaban por las acciones estrictamente pacíficas y los que consideraban que había que ir más allá, hecho que, según el activista, provocó en parte un apaciguamiento del movimiento. Por este motivo, ha asegurado que con la reanudación de la revolución en 2019 se decidió "respetar" las diferentes opciones y maneras de luchar siempre que fuera "por una misma causa". "Se necesita mucha madurez para dejar de lado diferencias aunque sean grandes", ha apuntado en este sentido.
Finalmente, ha reconocido que en la actualidad la protesta está más "tranquila", pero ha avisado de que en cualquier momento un nuevo acontecimiento político contrario a los intereses de los independentistas puede hacer que los manifestantes vuelva en la calle y la protesta se reavive de nuevo. Paralelismo, de nuevo, con Catalunya.