Alrededor de 200 manifestaciones celebradas este sábado en diferentes localidades del País Vasco y Navarra han reclamado el fin de la política de excepción para los presos de ETA, convocadas por la red ciudadana Sare. La marcha central, en Bilbao, ha contado con la presencia de representantes del independentismo catalán, que se ha sumado a organizaciones vascas como EH Bildu, Podemos, ELA, LAB, CCOO y UGT. El PNV, sin embargo, no ha acudido a la convocatoria.

Política de excepción

Este año, la gran manifestación por los derechos de los presos que suele acoger Bilbao, ha tenido transformarse, por la elevadísima incidencia de la covid y su variante ómicron, y dividirse en diversas manifestaciones en las tres capitales vascas y de Navarra, así como un número importante de localidades de ambos. Entre gritos reclamando la vuelta de los presos "a casa" y la ruptura de las cárceles, la marcha ha estado encabezada por familiares de presos de ETA a los que seguía una gran pancarta con el lema 'Bidean' (en camino).

Apoyo amplio

La manifestación en Bilbao, a la que se han adherido representantes de EH Bildu y Elkarrekin Podemos y de los sindicatos ELA, LAB, UGT, CCOO, Steilas, ESK, Etxalde, HIRU, CGT, CNT y ENHE, y ha contado con el apoyo de BNG, ERC, Junts, la CUP, la ANC, Òmnium y el Consell per la República, ha partido a las 17.00 horas de la Plaza Moyúa.

A mitad de recorrido, el portavoz de Sare, Joseba Azkarraga, ha valorado la jornada y ha apostado por poner fin a la actual política penitenciaria de excepción, "avanzando hacia espacios de convivencia". "Es difícilmente entendible que diez años después de la decisión de ETA de abandonar su actividad violenta se arrastre una política penitenciaria de excepción, con el 50% de los presos fuera de las cárceles de Euskal Herria y con un bloqueo en las progresiones de grado", ha criticado. Por otro lado, ha advertido que si en el presente año 2022 no se consigue poner fin a "esta vulneración de derechos", se estará ante un "fracaso colectivo".

Foto principal: la manifestación en Bilbao, convocada por la Sare / Europa Press