Pedro Sánchez ha enterrado (de momento) el montorismo constitucional (que viene de Montoro y de Constitución). A partir de hoy, la Generalitat puede pagar las facturas sin pasar por la supervisión del Ministerio de Hacienda. Esto, naturalmente, ya ha provocado la reacción de los que cada mañana salen de casa con la ropa interior cuatro tallas pequeña y con varias ortigas distribuidas por la parte interior (de la ropa interior).

Pero el cabreo demuestra dos cosas:

1/ Quien ha empezado la campaña pepino-pimiento con esto de que el actual Gobierno sólo representa la mitad de la sociedad y todo el bla, bla, bla que va de guarnición, ahora se ha tragado su propio anzuelo. (Por cierto, "campaña pepino-pimiento" significa que no para de repetirse, cómo su propio nombre indica).

Han elaborado una estrategia de intoxicación acusando president y consellers de sectarios, y cuando resulta que podemos disponer de un sistema financiero que beneficia a toda a la sociedad catalana, incluidos los que dicen que son "los suyos", en vez de alegrarse, se enfadan. ¿Por qué? Porque prefieren una Catalunya intervenida, aunque eso perjudique a "los suyos", antes que una Catalunya que tenga más posibilidades de funcionar mejor para todo el mundo. Incluidos "los suyos". Pero claro, si eso tiene que beneficiar a "los otros", entonces "aparta de mi este cáliz".

2/ Si ahora las facturas pasan sin supervisión es porque existe la certeza de que no se usará el dinero para hacer cosas feas, golpistas, sediciosas, nazis y, ¡ATENCIÓN!... malversadoras. Y eso, indirectamente, vuelve a demostrar que el llarenismo tiene la misma consistencia que el futuro político de Rajoy y que ha enviado a prisión provisional a 9 personas porque le ha salido de... bueno, ¿usted sabe aquello que los niños y las niñas son diferentes? Pues eso.

Ahora bien, este humilde servidor de usted tiene que reconocer que todo esto le provoca una añoranza retroactiva. Estos (y estas) que ahora tienen tanto de interés en las finanzas de la Generalitat, ¿dónde estaban cuando el Gobierno empezó a cobrarle a la Generalitat intereses por retornar a Catalunya el dinero de todos los catalanes? De los catalanes "suyos" y de los catalanes de los "otros". Bien, a ver, quizás me despisté, pero yo diría que callaron (y todavía ahora callan) como muertos (y como muertas) con la usura del FLA. ¿Se acuerda, verdad?

El Estado recaudaba (y recauda) en Catalunya y en el resto de comunidades el dinero de los impuestos de todos los ciudadanos y se los llevaba (y se los lleva) a Madrit (concepto). Una vez allí Montoro hacía el reparto pertinente y el dinero que devolvía y que servía para poder pagar la sanidad, la educación y el resto de competencias transferidas, venían con un interés añadido. Vaya, con un simpático recargo. De tal manera que Catalunya, País Valencià y Balears, sobre todo, no sólo tenían que pagar para poder disponer de sus propios ingresos sino que el Estado ganaba dinero con ellos..

No quiero ni imaginar qué disgusto tendrían algunos si algún día desapareciera el FLA y "los suyos" y "los otros" dejaran de pagar un impuesto revolucionario para poder financiar sus servicios.