Los que tienen un coche eléctrico en nuestro país saben muy bien que, lo mejor que se puede hacer en este caso, y de hecho para muchos es más que imprescindible, es instalar un cargador en casa o en el garaje comunitario de tal manera que siempre podremos disponer de un cargador a nuestra disposición.
Teniendo en cuenta que la inmensa mayoría de coches eléctricos siguen teniendo autonomías que se alejan mucho de las de los coches de combustión, cargar el coche acaba siendo un proceso que se realiza muchas más veces que ir a la gasolinera en el caso de un coche de gasolina o diésel.
En este sentido, lo más inteligente es instalar un cargador propio y cargar el coche de noche donde las tarifas de luz son mucho más baratas de tal manera que el coche siempre tendrá un buen nivel de carga y a un precio mucho más bajo que si optamos por cargarlo en los cargadores rápidos como son, entre otros, los súper cargadores de Tesla.
Cargar el eléctrico en un centro comercial, un truco polémico
Eso sí, no es que sea ningún secreto que cada vez son más los puntos de carga que podemos encontrar en muchos puntos diferentes de nuestra geografía, entre ellos puntos de carga que están situados en los parkings de grandes almacenes como es el caso de El Corte inglés.
La idea en este caso es que los que acudan a comprar con un coche eléctrico puedan aparcar el coche en el parking y cargarlo gratuitamente mientras estén realizando sus compras, un argumento más a favor de este tipo de coches. Es cierto que los cargadores de este tipo son muy lentos y que la batería apenas se carga en el tiempo en el que estamos comprando (que suele ser una media de cómo mucho una hora), pero sí que ayuda a, como mínimo, recargar un poco la batería.
El problema en este caso, y como bien podemos ver en este video, es que ya hay gente que está haciendo cola con su eléctrico a las puertas del parking antes incluso de que abran los grandes almacenes con la intención de dejar todo el día el coche cargando, algo que evidentemente va en contra del espíritu de esta idea y que ha generado polémica.
Sí, es una manera de cargar el coche sin pagar ni un euro, pero evidentemente son muchos los que acuden a comprar y quieren hacer uso de estos cargadores por un tiempo limitado los que ya se están quejando. Y con razón.