Mercedes-Benz ha desvelado en Dubái su nueva propuesta de movilidad premium con la presentación del Vision V, un prototipo que anticipa el futuro VLS, un monovolumen eléctrico de alta gama concebido para redefinir el concepto de lujo sobre ruedas. Este nuevo modelo se enmarca en la estrategia global de la marca para extender su gama eléctrica en segmentos donde el confort, el espacio y la exclusividad son factores determinantes, especialmente en mercados donde los vehículos de gran formato siguen teniendo una fuerte demanda.
El Vision V se presenta con unas dimensiones que superan las de cualquier monovolumen convencional. Mide 5,49 metros de largo, 2,10 metros de ancho y 1,89 metros de alto, lo que le permite ofrecer un habitáculo de proporciones generosas. La configuración interior está diseñada como un espacio de alto confort, con materiales nobles como cuero Nappa blanco, detalles en madera natural y un techo con iluminación ambiental. Todo el conjunto está orientado a proporcionar una experiencia más cercana a la de una limusina que a la de un vehículo familiar tradicional.
Entre los elementos más llamativos del interior se encuentran una pantalla retráctil de 65 pulgadas, un sistema de sonido envolvente con 42 altavoces y funciones de entretenimiento avanzadas como karaoke y proyecciones interiores. La atmósfera a bordo refuerza la idea de un salón móvil, pensado para clientes que buscan una movilidad eléctrica sin compromisos ni renuncias en cuanto a calidad, tecnología o exclusividad.
Plataforma VAN.EA y producción en España a partir de 2026
El Vision V está construido sobre la nueva arquitectura modular VAN.EA, que Mercedes-Benz empleará para desarrollar tanto versiones comerciales como variantes de lujo. Esta plataforma permitirá ofrecer múltiples configuraciones, con una clara diferenciación entre los modelos orientados al transporte profesional y aquellos diseñados para uso privado de alto nivel. En este sentido, el modelo definitivo VLS se posicionará como la opción más exclusiva, situándose por encima del actual Clase V en términos de refinamiento y tecnología.
La versión de producción contará con capacidad para hasta ocho pasajeros y ofrecerá una autonomía superior a los 800 kilómetros, lo que lo sitúa como una de las referencias en su categoría. Cabe destacar que la fabricación del VLS comenzará en 2026 en la planta de Mercedes-Benz en Vitoria, consolidando el papel de esta instalación como uno de los centros estratégicos de producción de vehículos eléctricos de la marca.
Por otro lado, el enfoque del VLS como “Gran Limusina” establece una nueva categoría dentro del segmento monovolumen, orientada a clientes que buscan el espacio y la versatilidad de este tipo de carrocerías con el nivel de confort y representación propio de una berlina de lujo. Con esta propuesta, Mercedes-Benz amplía su oferta eléctrica con un modelo que combina innovación técnica, diseño sofisticado y una ejecución centrada en el detalle, reforzando su apuesta por liderar la transición hacia la electrificación en todos los segmentos del mercado premium.