El Subaru Uncharted se ha presentado como un SUV eléctrico compacto que marca una nueva etapa para la marca japonesa. Su desarrollo se basa en la colaboración con Toyota, que ha aportado la plataforma y la base técnica, aunque Subaru lo comercializará con su propio diseño, ajustes de chasis y enfoque de mercado. A pesar de compartir gran parte de su ADN con un modelo Toyota, la firma ha trabajado para dotarlo de una personalidad diferenciada y orientada a un uso más aventurero.
Su diseño exterior mantiene las proporciones de un SUV compacto de perfil dinámico, con faros afilados, líneas de carácter muy marcadas y paragolpes con detalles específicos que lo separan visualmente de su “gemelo” de Toyota. El interior muestra una disposición moderna, con una gran pantalla central de 14 pulgadas, tres pantallas digitales de alta resolución para la instrumentación y una selección de materiales que incluye tapicerías resistentes y detalles en colores vivos, pensados para transmitir una estética práctica y robusta.
La gama mecánica del Uncharted estará compuesta por versiones de tracción delantera y total, algo inédito en Subaru desde hace casi tres décadas. La variante básica ofrecerá 221 CV y una autonomía que superará los 480 kilómetros, mientras que las versiones superiores, Sport y GT, alcanzarán los 338 CV y una cifra de alcance cercana a los 470 kilómetros. Esta variedad permitirá cubrir desde un uso urbano hasta un planteamiento más deportivo y rutero.
Prestaciones, carga y carácter propio
El sistema de propulsión se alimenta de baterías con capacidades que oscilarán entre 57,7 y 77 kWh, según la configuración elegida. Todas las versiones contarán con carga rápida de hasta 150 kW, suficiente para recuperar del 10 al 80 % en unos 30 minutos. Además, la adopción del puerto estándar NACS facilitará el acceso a la red de cargadores de alta potencia en mercados como el norteamericano.
Aunque su base técnica es Toyota, Subaru ha afinado parámetros clave como la suspensión, los controles de tracción y el sistema X‑Mode, característico de la marca, para garantizar un comportamiento solvente fuera del asfalto. De esta forma, el Uncharted pretende conservar el espíritu aventurero y polivalente propio de Subaru, adaptándolo a la nueva era eléctrica.
Llama especialmente la atención que este SUV sea el primero de la marca en ofrecer una versión de tracción delantera, una decisión pensada para ampliar su público y ofrecer precios de acceso más competitivos. Lo destacable en este caso es que el Uncharted inaugura un nuevo enfoque dentro de Subaru: mantiene la imagen de fiabilidad y espíritu outdoor, pero lo hace sobre una base tecnológica de Toyota que permite acelerar la llegada de un producto eléctrico moderno, eficiente y con una autonomía capaz de rivalizar con modelos de mayor tamaño.