Los Estados Unidos han anunciado que enviarán proyectiles antitanque de uranio empobrecido a Ucrania, siguiendo el ejemplo del Reino Unido, de enviar municiones controvertidas para ayudar a Kyiv a hacer frente a las tropas rusas en su contraofensiva. Rusia queda a la espera. 

Los proyectiles de 120 mm se utilizarán para armar los 31 tanques M1A1 Abrams que los Estados Unidos tienen intención de entregar a Ucrania en los próximos meses. Los proyectiles perforantes fueron desarrollados por los Estados Unidos durante la guerra fría para destruir los tanques soviéticos, incluyendo los mismos tanques T-72 que enfrenta a Ucrania en su contraofensiva.

¿Qué es el uranio empobrecido?

El uranio empobrecido es un subproducto del proceso de creación del uranio empobrecido, más extraño, utilizado en combustible y armas nucleares. Aunque es mucho menos potente que el uranio enriquecido e incapaz de generar una reacción nuclear, el uranio empobrecido es extremadamente denso –más denso que el plomo–, calidad que lo hace muy atractivo como proyectil.

Cuando se dispara, una munición de uranio empobrecido se convierte "esencialmente en un dardo de metal disparado a una velocidad extraordinariamente alta", ha destacado Scott Boston, analista sénior de defensa de Rand, una institución dedicada a la investigación. Eso significa que cuando golpea un tanque, lo atraviesa en un cerrar y abrir de ojos antes de explotar en una nube de polvo y metal, mientras que las altas temperaturas hacen explotar el combustible y las municiones del tanque.

Uranio empobrecido: ¿un riesgo para la salud?

Aunque las municiones de uranio empobrecido no se consideran armas nucleares, su emisión de niveles de radiación bajos ha llevado al organismo de control nuclear de la ONU a instar a tener precaución al manipularlas y advertir sobre los posibles peligros de exposición.

La manipulación de este tipo de municiones "se tendría que reducir al mínimo y utilizar ropa protectora (guantes)", advierte a la Agencia Internacional de Energía Atómica, añadiendo que "podría ser necesaria una campaña de información pública para garantizar que la gente evite manipular los proyectiles". "Eso tendría que formar parte de cualquier evaluación de riesgos y las precauciones mencionadas tendrían que depender del alcance y la cantidad de municiones usadas en un área", destaca.

La OIEA señala que el uranio empobrecido es principalmente una sustancia química tóxica, en contraposición a un peligro de radiación. Las partículas de los aerosoles se pueden inhalar o ingerir y, aunque la mayoría se excretaría nuevamente, algunas pueden ingresar en el torrente sanguíneo y causar daño renal. "Las altas concentraciones en el riñón pueden causar daños y, en casos extremos, insuficiencia renal", dice la OIEA.

Los tanques norteamericanos utilizaron municiones de uranio empobrecido, así como blindaje reforzado con uranio empobrecido, a la guerra del Golfo de 1991 contra los tanques T-72 del Iraq y nuevamente a la invasión del Iraq en el 2003, así como en Serbia y Kosovo.

 

Imagen principal: equipo de rescate después del ataque ruso a Kostyantynivka, Ucrania / Efe