Ayer domingo, como cada día, centenares de turistas visitaron el campo de concentración de Auschwitz, en una ruta para uno de los campos de concentración y exterminio nazis más conocidos. Durante esta visita, que siempre suele transcurrir en silencio, una turista holandesa pensó que era una buena idea hacer el saludo de los fascistas alemanes. Según ha informado este lunes en un comunicado a Bartosz Izdebski, el jefe de la oficina de prensa del Museo Memorial d'Auschwitz, la joven, de solamente 29 años, le pidió a su pareja que le hiciera una foto haciendo el saludo nazi delante de la puerta del campo. La policía detuvo la pareja y los condujo hasta la comisaría de Oswiecim, donde se encuentra el recinto del campo. El fiscal multó a la mujer e interrogó al suyo acompañado. Tal como han informado medios locales, la chica se mostró muy arrepentida de su gesto y aseguró que todo solamente había sido una "broma estúpida". Hay que tener en cuenta que en Polonia, exaltar en público cualquier ideología totalitaria o exhibir símbolos y gestos relacionados con estas, como podría ser el saludo nazi, puede suponer una pena de hasta dos años de prisión.

Otros casos chalados

El de esta pareja de holandeses no es, tristemente, el primer caso de turistas que aprovechan la visita a este campo de exterminación para realizar gestos como este. Por ejemplo, justamente también delante de la conocida como "puerta de la muerte" de Auschwitz, dos visitantes turcos fueron sorprendidos haciendo exactamente el mismo gesto en el 2013. Entonces, el castigo fue más severo. Más allá de la multa que ha tenido que pagar en las últimas horas esta chica para|por su desafortunada broma, los turcos fueron condenados a seis meses de prisión cada uno.

A finales del 2021, la dirección del campo se vio en la situación de condenar los mensajes que comparaban la exigencia del certificado covid y la persecución de los judíos durante el nazismo. Así, lamentaron los paralelismos entre "la tragedia de las personas que fueron víctimas de experimentos pseudomédicos" en el recinto y "el debate sobre las vacunas, la pandemia y quien lucha por salvar vidas humanas". "Es irrespetuoso con las víctimas y un triste síntoma de la decadencia intelectual y moral", publicó el museo en sus redes sociales. Justamente en las últimas horas, un político mallorquín ha sido destituido por su opinión sobre el certificado covid, del que ha dicho que tiene "claras reminiscencias" con el nazismo.

Fotos de fiesta

Otro de los casos más chalados para hacerse fotos de mal gusto  en este campo de concentración fue el del futbolista uruguayo Rodrigo Salazar. Cuando era jugador del Korona Kielce de Polonia decidió hacerse una fotografía ante el campo para celebrar su cumpleaños colgándola en las redes sociales e incluso añadiendo emoticonos de fiesta. Poco después, el futbolista tuvo que borrar la fotografía a causa de las críticas que recibió. Además, se disculpó también a través de las redes sociales con un vídeo donde esgrimió que "no sabía exactamente dónde estaba".