El ministro de Defensa de Rusia, Serguei Shoigú, ha advertido este martes que los suministros de armamento ofensivo occidental en Ucrania involucran cada vez más a los Estados Unidos y la OTAN en el conflicto.

"EE. UU. y sus aliados intentan alargar todo lo posible el conflicto. Por eso, han procedido al suministro de armamento pesado ofensivo y llaman abiertamente a Ucrania a tomar nuestros territorios. Prácticamente, estos pasos involucran los países de la OTAN en el conflicto y pueden conducir a un nivel de escalada imprevisible", ha dicho Shoigú durante una reunión ministerial.

¿A qué se refiere el ministro de Defensa?

Shoigú se ha referido a los suministros de misiles de largo alcance y de tanques, blindados y carros de combate en Kyiv, que llegarán al frente los próximos meses. Al mismo tiempo, ha destacado que el ejército ruso "sigue destruyendo todo el armamento y los equipos" enviados a Kyiv, cosa que incluye las rutas de suministro y sus posiciones en el campo de batalla.

Shoigú ha aprovechado también para presumir de éxitos en la región de Donetsk, escenario de los combates más cruentos entre rusos y ucranianos los últimos meses. "En la actualidad se están desarrollando con éxito las acciones militares en la zona de Ugledar (Vuhledar) y Artiomovsk (Bakhmut)", ha expuesto.

El ministro ha destacado la "liberación" en Donetsk y la región del sur de Zaporiyia de localidades como Soledar, Podgornoye, Krasnopolie o Blagodatnoye.

Los planes de Putin para el mes de febrero

Las tropas rusas están maquinando alguna cosa. El objetivo es acosar a las tropas ucranianas en la región del Donbás, mientras que Moscú sigue enviando a más tropas adicionales para una ofensiva esperada en las próximas semanas, quizás apuntando a la región de Lugansk. Semanas de intensos combates han continuado en la ciudad de Bakhmut y las localidades de Soledar y Vuhledar, según ha expuesto la oficina presidencial de Ucrania.

"Las batallas por la región se están intensificando", ha dicho Pavlo Kyrylenko, gobernador de Donetsk, en declaraciones en la televisión. "Los rusos están poniendo en marcha nuevas unidades a la batalla y erradicando pueblos y municipios". Las tropas rusas están ubicadas en la región de Donetsk, que junto con la vecina Lugansk forman la región del Donbás.

Precisamente en Lugansk, el gobernador Serhiy Haidai, ha dicho que los bombardeos habían disminuido porque "los rusos han estado ahorrando municiones para una ofensiva a gran escala". Hablando con el medio de noticias Vot Tak, ha dicho que "cada vez más" reservistas rusos se dirigían hacia Lugansk, después de que los informes de Moscú aseguraban que estaban acumulando tanques y personal en la región de Lugansk en los últimos meses. "Probablemente, necesitan unos 10 días con el fin de reunir las reservas", ha expuesto el mismo Haidai. Por lo tanto, todo podría comportar que estuvieran preparando una ofensiva durante la segunda quincena de febrero.