Los Estados Unidos han liderado en los últimos meses el envío de ayuda a Ucrania y no parece que eso tenga que cambiar, como mínimo a corto plazo y mientras Joe Biden siga siendo el presidente del país. Si los republicanos volvieran a la Casa Blanca después de las elecciones de noviembre del 2024 la situación podría ser muy diferente, ya que sus dos líderes y rivales electorales en las primarias del partido cuestionan la guerra y la necesidad de que los Estados Unidos envíen ayuda, tal como han ido haciendo hasta ahora. Así, Donald Trump y Ron DeSantis, a pesar de sus diferencias, coinciden en este punto.

Concretamente, el gobernador de Florida y el único gran triunfador republicano de las elecciones de pasado mes de noviembre, reduce la guerra de Ucrania a una "diputa territorial que no está entre los intereses nacionales vitales" de los Estados Unidos. Estas palabras chocan con las acciones de la administración de Joe Biden, que ha ido enviando ayuda al país de Volodímir Zelenski, cosa que según DeSantis es un error, ya que le ha dado un cheque en blanco para financiar este conflicto todo el tiempo que haga falta, sin objetivos definidos ni supervisiones, en lo que constituye una distracción de nuestros desafíos más urgentes". El autor de estas palabras será el rival de Trump a las elecciones primarías del partido republicano para la carrera presidencial, en el 2024.

Ucrania invita DeSantis a visitar el país

Según las encuestas, la posición que defienden los dos políticos norteamericanos es compartida entre sus votantes. Concretamente, un 80% considera que el candidato de su partido en la Casa Blanca no tiene que seguir involucrando los EE. UU. en la guerra de Ucrania, y un porcentaje más pequeño, pero igualmente significativo, cree que se tiene que romper definitivamente con el gobierno de Volodímir Zelenski y ponerse del lado de Vladímir Putin, a quien les une sus políticas anti LGTBI, por ejemplo. Desde la llegada de Trump al poder, el partido había dado un giro hacia el populismo, que se confirma con estas cifras. Cabe tener en cuenta que uno de los principales apoyos a DeSantis es el magnate Elon Musk, propietario de Twitter, que ha manifestado una opinión similar a la suya: quiere que Rusia se quede con Crimea y el Dombás y ha utilizado su red social para difundir noticias como 3.000 soldados norteamericanos han muerto en combate en Ucrania.

Desde Kíyv ya han reaccionado a estas polémicas declaraciones del gobernador de Florida. Lo ha hecho el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ucraniano, Oleg Nikolenko, que lo ha invitado a visitar el país para ver los efectos de la invasión rusa en primera persona. "DeSantis conoce las diferencias entre una disputa y una guerra. Lo invitamos a visitar Ucrania para obtener una comprensión más profunda de la invasión a gran escala de Rusia y las amenazas que representa para los intereses de los Estados Unidos", le ha propuesto, sin respuesta.