La OTAN ha decidido este viernes desplegar por primera vez las denominadas fuerzas de respuesta rápida, para aumentar la defensa de los aliados en plena invasión rusa de Ucrania. Después de una reunión telemática de los líderes aliados, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha anunciado un despliegue por tierra, mar y aire de estas fuerzas para responder a cualquier contingencia. Las fuerzas de respuesta rápida están formadas por unos 40.000 efectivos con capacidad para desplegarse en un plazo de cinco días y durante un máximo de 30. Hace justo un mes, Estados Unidos ya anunció que ponían en alerta a 8.500 soldados para dar apoyo a una posible activación de las fuerzas de actuación rápida de la OTAN ante una agresión de Rusia. En esta estructura se incluyen las brigadas internacionales de la fuerza conjunta de muy alta disponibilidad, unos batallones de miles de efectivos que tendrían el apoyo de fuerzas aéreas, navales y de operaciones especiales, y podrían desplegarse de urgencia para hacer frente a crisis militares.

Los países del flanco oriental de la OTAN han pedido en el encuentro más firmeza contra Rusia y más apoyo a Ucrania ante la agresión militar, en forma de envío de armas para defenderla y sanciones más eficaces contra Moscú. "Sólo la Rusia de Putin es responsable de la guerra en Ucrania, no podemos limitarnos a condenar pasivamente este brutal ataque. Tenemos que dar apoyo a Ucrania con más fuerza, especialmente a través del suministro de armas", ha asegurado el presidente polaco, Andrzej Duda, en la inauguración de una reunión con los líderes del llamado B9, que reúne a los miembros de la OTAN de Europa oriental.

Las fuerzas hoy anunciadas no irán destinadas a Ucrania, donde la OTAN descarta intervenir con efectivos militares porque no está en la Alianza Altàntica, sino a los países occidentales próximos a Rusia. La noticia de la OTAN ha coincidido con el hecho de que el presidente ruso, Vladimir Putin, ha abierto hoy dos nuevos frentes, concretamente con Finlandia y Suecia. La portavoz de Exteriores rusa, Maria Zajarova, ha recordado en rueda de prensa que "todos los Estados participantes de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa), incluidas Finlandia y Suecia, reafirmaron en su día el principio que la seguridad de algunos Estados no se tiene que construir a costa de la seguridad de otros países". Y ha asegurado que "es evidente que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN, que es principalmente un bloque militar, tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían que nuestro país tomara medidas recíprocas". A modo de respuesta, Finlandia ha vetado el canal ruso Russia Today, para dar apoyo a Ucrania ante el ataque ruso.

Sanna Marin, primera ministra de Finlandia, afirmó el jueves que la invasión rusa de Ucrania "cambiaría el sentido del debate" sobre la adhesión de su país a la OTAN. Asimismo, en las últimas horas, el primer ministro ucraniano, Volodimir Zelenski, ha agradecido a Suecia y Finlandia la ayuda militar, técnica y humanitaria proporcionada. Mientras tanto, la Unión Europea de Radiodifusión (UER) ha anunciado que Rusia no participará en el festival de Eurovisión que se celebrará el mes de mayo próximo en Turín, a consecuencia de la guerra iniciada por el gobierno de Vladimir Putin. Así pues, el órgano que organiza el acontecimiento ha cambiado de opinión y ha reaccionado a las protestas de otros países de Europa en contra que se mantuviera a Rusia en la competición en medio del conflicto armado.