El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha advertido este jueves que el despliegue en los últimos días de tropas de Rusia en Bielorrusia, vecina de Ucrania, es "el mayor" que ha hecho Moscú desde la Guerra Fría. "Se esperan 30.000 tropas de combate, Spetsnaz, que se trata de unas fuerzas especiales de operaciones, incluyendo el Su-35, misiles Iskander con capacidad dual y sistemas de defensa aérea S-400", ha indicado Stoltenberg en una declaración en la prensa en el cuartel general de la Alianza, en la cual ha alertado de qué se trata de una "amplia gama de modernas capacidades militares". Es más, ha afirmado que este "movimiento significativo de tropas rusas dentro de Bielorrusia" que se ha visto en los últimos días, es "el despliegue mayor ruso desde la Guerra Fría".

Consecuencias para Rusia

Por otra parte, Stoltenberg ha advertido que este despliegue se combina con el ejercicio nuclear anual de Rusia previsto para febrero. Ha recordado que entre el 10 y el 20 de febrero Moscú y Minsk tienen acordado celebrar maniobras militares conjuntas. El secretario general aliado se ha pronunciado de esta manera en declaraciones en la prensa después de reunirse con el primer ministro de Macedonia del Norte, Dimitar Kovacevski. "La OTAN sigue pidiendo en Rusia que rebaje la tensión. Cualquier nueva agresión rusa tendría consecuencias severas y comportará un elevado precio", ha advertido. El político noruego ha asegurado así que la Alianza Atlántica está dispuesta a implicarse en un "diálogo significativo" con Moscú y que ya ha enviado propuestas por escrito en Rusia.

De la misma manera ha asegurado que "los aliados están preparados para abordar las relaciones OTAN-Rusia, como reducir riesgos e incrementar la transparencia, y el control de armas y la no proliferación." En cualquier caso, ha dejado claro que la OTAN "no comprometerá principios fundamentales", y se ha referido en concreto al "derecho de cada país a escoger su propio camino" y "la capacidad de la OTAN de proteger y defender a todos los aliados". Aunque Stoltenberg ha advertido que "están preparados para el peor escenario" ha dejado claro que "estamos comprometidos con encontrar una solución política a la crisis". El secretario general también ha aprovechado para referirse al anuncio de este miércoles de los Estados Unidos que desplegará a 3.000 tropas adicionales en Alemania, Polonia y Rumania ante la amenaza rusa.

"Estamos unidos"

"Es una poderosa señal del compromiso de los EE. UU. y se suma a otras contribuciones recientes de los EE. UU. a nuestra seguridad compartida", ha asegurado, en referencia al hecho que también ha puesto un grupo de ataque de portaaviones bajo el mando de la OTAN al Mediterráneo y al hecho que ha proporcionado a 8.500 soldados en alta disposición para la Fuerza de Respuesta de la Alianza. Stoltenberg ha recordado que ya han puesto en alerta la Fuerza de Respuesta de la OTAN y está considerando el despliegue de batallones adicionales en la parte sudeste de la Alianza. Igualmente, ha dado la bienvenida a las ofertas recientes de los Aliados para mejorar la disuasión y la defensa de la OTAN "con más tropas, más barcos y aviones". "La OTAN une a Europa y Norteamérica para hacer frente a la crisis actual. Somos fuertes, estamos decididos y unidos en nuestra respuesta", ha declarado.