La Franja de Gaza se hunde en una crisis humanitaria devastadora, marcada por una oleada de saqueos, robos y violencia que reflejan la desesperación de una población hambrienta y desprotegida. Como informaba recientemente The Guardian, bandas armadas asaltan almacenes de ayuda humanitaria, comedores sociales y hornos de pan en medio de un colapso total del orden público.

Después de más de dos meses de bloqueo israelí, muchas familias solo pueden hacer una comida al día, y la harina en mal estado se vende a precios astronómicos. El combustible ha desaparecido y solo se encuentra leña o plástico para cocinar. Según relatan varios testimonios recogidos por The Guardian, la falta de alimentos ha provocado escenas de pánico, enfrentamientos entre civiles y asaltos violentos a centros de distribución.

Gaza, el epicentro de la crisis

La ciudad de Gaza es el epicentro de la crisis. La semana pasada, grupos armados irrumpieron en varios hornos de pan buscando harina, y como no encontraron, saquearon comedores comunitarios. También se registraron robos de baterías, ollas y teléfonos móviles. En un caso, el personal de una ONG fue amenazado con cuchillos mientras se producía el saqueo.

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Un niño palestino desplazado, delante de la tienda de su familia en el estadio Al Yarmouk en el centro de la ciudad de Gaza, la Franja de Gaza, el 5 de mayo de 2025. Según la ONU, al menos 1,9 millones de personas (o nueve de cada diez personas) en la Franja de Gaza están desplazadas internamente / Efe

La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) tuvo que evacuar a su personal después de que miles de personas invadieran su oficina en la ciudad de Gaza. Louise Wateridge, funcionaria de emergencias de la agencia, declaró a The Guardian que este saqueo es una "consecuencia directa de una privación insoportable y prolongada".

La inseguridad en la Franja, el otro nuevo problema

La inseguridad se ha convertido en una constante. Según informa el mismo diario británico, familias como la de Mari Al Radea se ven obligadas a hacer guardia cada noche para protegerse de los robos. "La mayoría de tiendas han sido saqueadas y nadie osa buscar a los responsables, porque no hay ninguna presencia policial," explica esta madre de nuevo hijos.

Durante el breve alto el fuego entre enero y marzo, Hamás desplegó patrullas para controlar la situación, pero estas se retiraron después de sufrir ataques aéreos israelíes. Ahora, el Ministerio del Interior de Gaza ha confirmado que ha ejecutado a seis personas acusadas de saqueo y ha castigado trece más con tiros en las piernas.

En palabras recogidas por The Guardian, un trabajador humanitario advierte: "Cuando se declare oficialmente el hambre, ya será demasiado tarde." La Franja de Gaza, atrapada entre el bloqueo, el hambre y el desorden, vive hoy inmersa en una crisis sin salida visible.