El Ministerio de Sanidad de Gaza, controlada por Hamás, afirma que ya son 36 los muertos y 208 los heridos este martes por tiros y artillería israelí en diferentes puntos de la Franja de Gaza cuando se dirigían a recoger comida. Según los datos del ministerio, dependiente de Hamás, 32 de los 36 "civiles" han muerto cuando esperaban que llegaran camiones de organizaciones de la ONU y recibir ayuda a la zona del corredor de Netzarim (centro).
Siete han muerto en el centro abierto a Wadi Gaza (centro) por la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF, por las siglas en inglés), una organización privada de contratistas norteamericanos que está gestionando cuatro puntos de reparto de ayuda de acuerdo con un nuevo mecanismo establecido por Israel para evitar la ONU. I 4 personas más murieron en el centro de distribución de esta fundación en Tal En el Sultan, en la zona del sur de Rafah próxima a la frontera con Egipto.
Desde que el 27 de mayo la GHF empezara a operar en la franja palestina, el Ministerio de Sanidad afirma que 163 personas han muerto y 1.495 más han resultado heridas cuando recogerían ayuda. "Desde la apertura de los denominados centro de distribución, han sido asesinados cada día ciudadanos buscando ayuda. Centenares caminan largas distancias diariamente para recibir ayuda para encontrarse con la muerte", ha explicado el director de la unidad de información del Ministerio de Sanidad de Gaza, Zaher al-Waheidi, en un mensaje de audio.
Ha añadido que esta mañana "ha sido una de las más sangrantes y al menos 36 civiles, 32 de ellos en la zona de Netzarim, han muerto por fuego israelí. Más de 200 han quedado heridos, la mayoría por tiros y otros por fuego de artillería cerca de los centros de ayuda", ha añadido. Desde la puesta en marcha del nuevo modelo de distribución controlado por GHF, prácticamente cada día se están registrando muertos mientras esperan cerca de los nuevos puntos de reparto comer controlados por esta organización privada norteamericana y custodiados por las fuerzas israelíes.
Los organismos internacionales y la ONU, que solían ser los principales encargados de la distribución de ayuda y ahora, tienen un papel secundario, han criticado la iniciativa para considerar que no es neutral y que obliga a los palestinos a desplazarse a zonas militares.
Israel permite a estas organizaciones que entren algunos camiones, pero en un número muy lejos de los 600 al día que la ONU considera tienen que entrar en Gaza. Paralelamente, la fundación reparte en cuatro puntos, tres en el sur y un cuarto en el centro, pero lo cual abren puntualmente y de forma irregular por cuestiones de seguridad y al acabar pronto la ayuda que traen.