Independentistas corsos han atacado esta tarde con cócteles Molotov la prefectura (delegación del gobierno) en Bastia, y otros se han concentrado ante la delegación del Banco de Francia, y han agrupado contenedores donde han prendido fuego. La protesta ha empezado a las 6 de la tarde, y efectivos antidisturbios han respondido con el lanzamiento de munición atronadora. A causa de eso, los enfrentamientos se han extendido al centro de la ciudad, la segunda en importancia después de Ajacciu. Las formaciones que han convocado la protesta denuncian que en las movilizaciones de los últimos días, la Gendarmería ha efectuado 11 detenciones, y que 60 personas han resultado heridas.

Mientras tanto, el abogado de la familia del líder corso Yvan Colonna ha presentado una denuncia contra el Estado francés, por la muerte del activista a consecuencia de una agresión mortal en la carcel de Arles. La acción ha sido presentada ante el tribunal administrativo de Marsella, y considera que "la administración penitenciaria es legalmente responsable de su muerte", causada por el islamista Franck Elog Abé. Insiste en que el islamista ya había protagonizado otras acciones violentas en el centro penitenciario. "Los diferentes aspectos de la investigación denunciados por la prensa y las audiencias de los parlamentarios sólo alimentan la sospecha de que el ataque que sufrió Yvan Colonna está directamente relacionado con una serie de disfunciones administrativas", argumenta. Recuerda que la ley francesa establece que "la administración penitenciaria tiene que garantizar que todo detenido disfrute de una protección efectiva de su integridad física en todos los lugares colectivos e individuales". "El Estado está así obligado a indemnizar a los herederos de un preso que ha muerto a consecuencia de la violencia cometida dentro de un establecimiento penitenciario por otro detenido", ha argumentado el abogado, que reclama 200.000 euros en daños por Yvan Colonna y 100.000 euros para cada miembro de la familia.

Más de 10.000 personas se concentraron el domingo en la isla siguiendo el clamor que muchos dirigentes políticos, sindicatos y estudiantes lanzaron contra el asesinato de Colonna, que había sido condenado a cadena perpetua por el asesinato de un prefecto francés en 1998. Aunque previamente a la manifestación se requisaron pelotas de petanca y barras de hierro, al acabar manifestantes encapuchados se dirigieron hacia la delegación del estado francés en Ajacciu e hicieron múltiples lanzamientos de cócteles Molotov, entre otros objetos inflamables. Los policías antidisturbios, los CRS, contestaron con lanzamiento de gases lacrimógenos, y golpes de porra.