Los independentistas de Córcega ya avisaron ayer después de que se filtrara un vídeo donde los antidisturbios franceses reías y bromeaban durante el funeral del preso nacionalista corso Yvan Colonna. Se difundieron algunos vídeos a las redes sociales que mostraban los Cuerpos Republicanos de Seguridad (CRS) realizando gritos y aplausos en la ceremonia, a la vez que empezaban a cantar el himno nacional francés ("La Marsellesa"). Cargos públicos y dirigentes políticos han condenado los hechos y han pedido explicaciones por actitudes de este tipo, pero no ha servido de mucho, ya que el movimiento nacional de la isla ya había convocado las manifestaciones contra muchas comisarías de la policía francesa. Siguiendo el hilo de la contundencia de las acciones de los independentistas corsos, hoy han quemado varias prefecturas de los CRS.

En la ciudad de Asperetto multitud de manifestantes han tirado cócteles molotovs contra la comisaría, hasta que ha desembocado en un enfrentamiento cuerpo a cosa que ha sido contrarrestado con gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento. En la localidad de Furiani, un millar de manifestantes han tirado una docena de cócteles molotov contra los policías, que han respondido con contundencia. En Ajaccio y Bastia, las ciudades más importantes de la isla, también se han registrado disturbios, que han sido disparados por los cuerpos de seguridad con gases lacrimógenos. En Furiani la batalla campal se ha enquistado y, aunque ya ha caído la noche, los incidentes siguen quemando las calles de la ciudad de Córcega.

El miembro de la Asamblea de Córcega Luis Pozzo di Borgo ha compartido imágenes del momento donde los policías se mofan de la muerte de Colonna, registrado en la localidad de Furiani. "Vídeo de aclamaciones y aplausos de CRS. Los hechos supuestamente han tenido lugar durante el funeral de Yvan Colonna. Si son ciertos, serán extremadamente graves. Como cargo electo, espero explicaciones públicas, sin demora", expresó en un tuit este sábado.

Córcega hizo este viernes un despido masivo al preso Yvan Colonna, que murió el 21 de marzo después de ser atacado semanas antes en la prisión de Arlès (Provenza). Los restos mortales de Colonna fueron enterrados a su pueblo natal de Carghjese, en el sur de la isla. Una multitud asistió al sepelio con banderas de Córcega y un ambiente silencioso y contenido. El funeral se ofició en la iglesia del pueblo, y estuvo presente el alcalde de la población así como dirigentes del independentismo corso. El féretro con los restos de Colonna, que era campesino, estaba cubierto por la bandera corsa y fue llevado por los familiares.