La llega de los talibanes a Kabul ha desatado el miedo entre los afganos, pero también entre los diplomáticos que viven y trabajan en la capital de Afganistán. Muchos gobiernos internacionales se han apresurado a movilizar al personal de sus embajadas para que abandonen el país.

El miedo por las represalias a todos aquellos representantes o trabajadores vinculados a las embajadas contrarias a la agenda política de los talibanes se ha apoderado de la política exterior de muchos países. Sacar a las personas vinculadas a la embajada ha sido una prioridad para muchos estados en las últimas horas. 

Uno de los primeros países en finalizar la evacuación de su personal diplomático ha sido, ni más ni menos, que uno de los principales actores de este conflicto. Los Estados Unidos han finalizado el traslado de todos sus trabajadores a la embajada, aproximadamente 4.000 personas, según informa Efe. Para llevar a cabo esta operación el Pentágono autorizó el envío de 1.000 soldados, los cuales se suman a los que ya estaban presentes sobre el terreno. En total, aproximadamente 6.000 militares estadounidenses en el aeropuerto afgano, según el portavoz del Pentágono, John Kirby.

Evacuación europea

Entre los países europeos que más rápidamente están evacuando a su población encontramos a Alemania. Los alemanes han contado con la colaboración de aviones militares estadounidenses, a bordo de los cuales abandonaron el país unos 40 miembros de la embajada alemana. El resto del personal de la embajada y sus familiares se encuentran en la zona militar del aeropuerto de Kabul a la espera de la organización completa del dispositivo de evacuación. El gobierno alemán ha subrayado que su prioridad es evacuar "a cuantas personas sea posible", tanto personal de la embajada y sus familiares como colaboradores locales.

En cambio, los trabajadores vinculados con la embajada española recibirán hoy la ayuda para ser evacuados. Este lunes el Ejecutivo español ha enviado dos aviones con destino a Dubái con el fin de llevar a cabo la primera fase de la repatriación del personal diplomático desplegado en Afganistán.

Finlandia ha cerrado hoy formalmente su delegación diplomática en Kabul y ha iniciado la evacuación tanto de su personal como de sus trabajadores afganos, ha informado el Ministerio de Exteriores desde Helsinki.

Otros países ya habían avanzado posiciones para la evacuación los días anteriores. ​Suecia, Noruega y Dinamarca comunicaron el cierre de sus embajadas el pasado fin de semana y aceleraron también entonces los preparativos para la evacuación de su personal.

Retirada de otros miembros de la región

No solo los estados occidentales empacan todo el que pueden rápidamente para dejar atrás a los talibanes, también lo hacen algunas de las potencias de la región como los Emiratos Árabes. El conjunto de monarquías confederadas ha llamado a todos sus trabajadores para que  abandonen el país y les ha facilitado la partida.

Desalojo nipón

Japón también se ha apresurado a sacar de Afganistán a sus diplomáticos. La delegación diplomática japonesa, integrada por más de diez empleados, ya ha abandonado la embajada y está a la espera de ser evacuada del territorio, según detalles publicados este lunes por la cadena pública NHK.

El gobierno nipón ha pedido a sus ciudadanos que abandonen el país cuanto antes mejor, según informa Efe.

 

Imagen principal: un grupo de personas se dirigen al aeropuerto de Kabul con el fin de abandonar el país / Efe