Ante la posibilidad de que el Tribunal Supremo de los Estados Unidos revoque el derecho al aborto, que está en vigor en este país desde 1973, Canadá se ha ofrecido como un espacio seguro para que las mujeres que quieran interrumpir su embarazo lo puedan hacer en este territorio. Así lo ha expresado la ministra de Familias del gobierno de Justin Trudeau, Karina Gould, que ha asegurado que su país está dispuesto a dar la asistencia a todas las mujeres que lo necesiten. "No veo porque no", ha respondido Gould en una entrevista a la CBC, la televisión pública del país. "Si vienen aquí y necesitan acceso, es un servicio que les podríamos dar", ha añadido la responsable, después de que el mismo Trudeau defendiera en este contexto el "derecho a decidir" de las mujeres.

El portal Politico ha filtrado esta misma semana un borrador con el dictamen mayoritario del Supremo, firmado por el magistrado Samuel Alito, según el cual se habría acordado revocar el derecho al aborto en el país después de llegar a un acuerdo con el juez Clarence Thomas y los tres propuestos para el máximo tribunal por el expresidente Donald Trump (2017-2021): Neil M. Gorsuch, Brett M. Kavanaugh y Amy Coney Barrett. La máxima instancia judicial del país cuenta con seis jueces conservadores y tres liberales. "Es hora de acatar la Constitución y devolver el tema del aborto a los representantes elegidos por el pueblo", señal el documento. Al tratarse de un borrador, sin embargo, la decisión todavía podría cambiar y no se espera un veredicto oficial hasta junio. La filtración de una decisión del Supremo sobre un tema tan controvertido y todavía en discusión es un hecho sin precedentes en la historia reciente de los EE. UU.

Una posible avalancha de solicitudes

En un tuit, el popular primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, posicionó rápidamente delante de este polémico borrador, defendiendo el derecho a decidir de las mujeres de todo el mundo. En un tuit, garantizó que todas las mujeres en su país tienen derecho a un aborto "seguro y legal" y que nunca dejará de proteger y promover los derechos de las mujeres en Canadá y al resto del mundo. Hay que tener en cuenta, que, ahora mismo, la legislación canadiense establece que las mujeres nacidas y residentes en el país tienen acceso a un aborto libre y gratuito, pero las mujeres que no viven al territorio pueden acceder si pagan por este servicio, a no ser que tengan un seguro privado. Si, como indica el borrador, el Supremo suspende la ley que permite el aborto, conocida como Roe contra Wade, sería cada uno de los estados los que tendrían que legislar sobre este derecho, hecho que puede provocar una avalancha de solicitudes de aborto en Canadá.