Un grupo de hombres armados ha atacado hoy el canal privado de televisión Shamshad TV en Kabul, y han acabado con la vida de al menos un guardia de seguridad y un asaltante, según han informado fuentes del canal y la Policía.

Un empleado de Samshad TV ha confirmado el ataque y ha añadido que el tiroteo todavía continúa. Por su parte, el canal de televisión, a través de su cuenta de Twitter, ha declarado que hay "varias víctimas dentro del edificio".

El portavoz de la policía de Kabul, Basir Mujahid, ha afirmado que "varios hombres han atacado Shamshad TV en Kabul, después de matar a un guardia de seguridad". El portavoz del Ministerio del Interior, Najib Danish, ha indicado que "entre 2 y 3 atacantes" han entrado en la cadena" y que al menos uno de ellos ha estado abatido, cerca que las fuerzas de seguridad han podido acceder al complejo. También ha asegurado que se está haciendo "todo el posible" para abatir al atacante restante y que tienen informaciones sobre dos empleados heridos leves, aunque "todavía no está claro". Con respecto al resto de empleados del canal, estos han sido evacuados, pero parte del personal de la televisión permanece dentro del edificio.

El portavoz de los talibanes Zabiullah Mujahid, ha asegurado en su cuenta de Twitter que su grupo no está involucrado con este ataque.

El mes de mayo un grupo de hombres armados asaltó la sede de la Radio Televisión Nacional de Afganistán (RTA) en Jalalabad, capital de la provincia oriental de Nangarhar, en un ataque donde murieron los tres asaltados y dos civiles.

La capital afgana, objeto de numerosos ataques insurgentes

Kabul, la capital de Afganistán, ha sufrido durante todo el año una serie de ataques insurgentes de gran escala.

Hace una semana, al menos tres personas murieron y 15 resultaron heridas durante un atentado en la zona diplomática de Kabul, donde se encuentran varias embajadas y oficinas del Gobierno afgà, a una hora de alta afluencia de personas.

Desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015, Kabul ha ido perdiendo terreno ante los insurgentes hasta llegar a controlar a duras penas un 57% del país, según el inspector especial general para la Reconstrucción del Afganistán (SIGAR) del Congreso de los Estados Unidos.