Al menos 35 personas han muerto y unas 90 más han resultado heridas este martes por|para la noche a causa de siete ataques aéreos perpetrados por la aviación de la coalición árabe, liderada por la Arabia Saudí, contra una prisión de la capital del Yemen, Saná, según han informado este miércoles algunos testigos.

Los bombardeos han tenido lugar en una prisión que está situada dentro de un cuartel de la Policía militar, dirigida por los rebeldes chiíes hutís, y que estos utilizaban para encarcelar a sus opositores. Tres del siete ataques tuvieron como a blanco el edificio del cuartel, donde se encontraban la mayor parte de los presos, mientras que dos ataques más se han dirigido contra una grande sala donde también había reos.

Un responsable del cuartel ha declarado que decenas de presos todavía se encuentran en parador|paradero desconocido, y ha cifrado en 180 a las personas encarceladas en el lugar de los hechos.

Por su parte, miembros de los rebeldes hutís han asegurado que la coalición ha realizado dos ataques contra los reos que estaban huyendo después de los primeros bombardeos. El responsable ha rechazado dar detalles de si los presos eran partidarios del difunto ex-presidente yemení Ali Abdalá Saleh, quien había luchado en el bando rebelde en los últimos años y fue asesinado por los hutís después de ser acusado de traición.

Según los testigos, las ambulancias siguen trasladando a los hospitales los cadáveres de los presos.

Intensificación de los bombardeos

El último día 6 de diciembre, la aviación de la coalición árabe, que da apoyo al exiliado presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, ha intensificado los bombardeos en el Yemen con decenas de ataques.

Los rebeldes dominan Saná y amplias zonas en el norte y el oeste del país, mientras que las fuerzas de Hadi controlan partes del sur, del centro y del este.

Desde que se inició la intervención de la coalición árabe, en marzo del 2015, al menos 5.144 civiles han muerto por el conflicto, 3.233 de ellos debido a los bombardeos de la coalición, tal como indica un recuento del ONU hasta el pasado 30 de agosto.