Catalunya ofrece una gran variedad de paisajes y atractivos únicos escondidos por todo el territorio. Hoy haremos un viaje a una Catalunya inédita donde te presentaremos los 5 municipios más pequeños y todo lo que nos pueden ofrecer. Dejamos de lado la magnífica Costa Brava o los encantos del Pirineo y desde la sección veraniega de La Tumbona de ElNacional.cat nos adentramos a los pueblos más pequeños de Catalunya para descubrir todo lo que nos ofrecen.

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Municipios más pequeños de Catalunya

Este artículo nos llevará de un viaje por algunos de los municipios a más pequeños de Catalunya, destacando sus características distintivas, patrimonio cultural y atractivos únicos. ¿Estás preparado para este viaje?

Municipios más pequeños de Catalunya
Municipios más pequeños de Catalunya

Gisclareny, en el Berguedà

El pequeño pueblo de Gisclareny está situado dentro del parque natural del Cadí-Moixeró al Berguedà. Gisclareny presenta una paradoja, ya que es uno de los pueblos con más extensión del Berguedà, pero también es el municipio más pequeño de todo Catalunya. Aparte de ser el municipio más pequeño de Catalunya con solo 28 habitantes, Gisclareny nos ofrece un entorno natural envidiable. Desde este pequeño pueblo podemos observar el Pedraforca, una de las montañas más emblemáticas de Catalunya.

Sant Jaume de Frontanyà, en el Berguedà

Sant Jaume de Frontanyà ha quedado relegado en segunda posición de los municipios con menos población de Catalunya. Este pueblo, construido en torno a la iglesia de Sant Jaume de Frontanyà, tiene un total de 31 habitantes. El pueblo celebra su fiesta mayor el día 25 de julio y se puede visitar la iglesia, el santuario de Santa Maria dels Oms o la ermita de Sant Esteve de Tubau. En los alrededores del pueblo encontramos varias fuentes naturales y pozos, perfectos para pasar un día admirando la belleza de la naturaleza.

La Febró, en el Baix Camp

La Febró es un municipio poco conocido y es uno de los municipios menos poblados de Catalunya. Este pueblo se encuentra en la provincia de Tarragona, en el Baix Camp, y está donde nace el río Siurana. Además, forma parte de las Montañas de Prades, un conjunto montañoso que atraviesa las comarcas del Alto y Baix Camp, la Conca de Barberà y el Priorat. Una de las excursiones más conocidas es el pozo de La Febró y los Avecs de la Febró, dos paisajes naturales que te dejarán sin palabras.

pozo de la febro
Pozo de La Febró

Senan, la Conca de Barberà

Senan, situado en la Conca de Barberà, se encuentra en un extremo de la sierra del Tallat. El pueblo marca el límite en las comarcas de la Conca de Barberà y Les Garrigues. Este municipio de 44 habitantes está formado en torno al antiguo castillo del pueblo. Como la mayoría de las villas, el edificio más emblemático es la iglesia de Santa Maria de Senan.

Fígols, en el Berguedà

El municipio de Fígols cierra nuestro viaje por los municipios más pequeños de Catalunya. Actualmente, según los últimos datos del Idescat, Fígols tiene una población 45 habitantes. Situado en la provincia de Barcelona, Fígols tiene la iglesia románica de Santa Cecília, una de las visitas más recomendadas. Como curiosidad, gracias a la actividad minera del municipio, se encontraron restos de huellas y huevos de dinosaurio que hoy se pueden visitar en el yacimiento paleontológico de Fumaya.

Catalunya ofrece mucho más que sus destinos turísticos más famosos. Descubrir los rincones más escondidos de Catalunya es una oportunidad para enriquecer las experiencias culturales, naturales e históricas. Sus regiones menos conocidas esconden paisajes mágicos y auténticos, que vale la pena descubrir. Ya sea disfrutando de la naturaleza a los bosques y montañas o explorando el pasado histórico de los pueblos, estos lugares inéditos ofrecen experiencias únicas e inolvidables para todos los que decidan aventurarse.