Tal día como hoy del año 1959, hace 59 años, moría en Castelló (País Valencià) Gaetà Huguet i Segarra, que había sido uno de los pioneros en la formulación del valencianismo político. Huguet, nacido en Castelló el año 1882 en una familia de industriales vinícolas de ideología republicana, se licenció en Ciencias Químicas en la Universidad de Barcelona y en Ciencias Agrónomas en el Institute National Agronomique de París. Cuando vovió a Castelló pasó a dirigir el negocio familiar y frecuentó los ambientes culturales y políticos de la capital de la Plana.
En el año 1909 fue uno de los fundadores de la Joventut Nacionalista Valenciana, una formación política republicana y valencianista que surgía del plantel formado en la asociación cultural Lo Rat Penat, fundada en 1878 por Llombart, Llorente y Pizcueta, impulsora de la Renaixença en el País Valencià y creadora de la idea de Països Catalans. Huguet lideró la primera generación de intelectuales que llevaron el valencianismo cultural al terreno político. Fue uno de los firmantes de las Normes de Castelló (1932) —que reconocían la unidad de la lengua— y el fundador de Esquerra Republicana del País Valencià.
Los firmantes de las Normes de Castelló (1932) / Fundació Huguet
Cuando Huguet firmó las Normes y fundó ERPV, el valencianismo político ya había alcanzado la madurez. En 1932 se habían celebrado en todo el país varias manifestaciones de reivindicación del Estatut: la más multitudinaria había reunido a más de 100.000 personas en València cap i casal y había sido la mayor concentración hasta entonces de la historia del País Valencià. El valencianismo político no tan solo estaba articulado en el esquema clásico derecha-izquierda, sino que, gracias a personalidades como Huguet, era también la idea que generaba más consenso en la sociedad valenciana.
Huguet se marchó al exilio en las postrimerías de la Guerra Civil española (1936-1939). Cuando volvió (1951) fue, con su amigo Carles Salvador Gimeno, el creador y promotor de cursos de lengua valenciana. A su muerte se crearía, por voluntad testamentaria, la Fundació Huguet, que ha sido una bastión de resistencia y uno de los grandes focos de divulgación de la lengua y de la cultura valencianas.
Imagen principal: Gaetà Huguet / Fundació Huguet