Tal día como hoy del año 1877, hace 141 años, moría en Carhué (Argentina), Adolf Alsina, que en el transcurso de su vida había sido gobernador de la provincia autónoma de Buenos Aires (1866-1868), vicepresidente de la República Argentina (1868-1874) y ministro de Guerra y Marina de la República Argentina (1874-1877). Adolf Alsina, nacido en Buenos Aires el año 1829, era uno de los ejemplos más paradigmáticos del éxito económico y del poder político que había conseguido la comunidad del barrio de Montserrat, fundado en el oeste de la ciudad de Buenos Aires el año 1750 por el comerciante de pieles catalán Joan Pere Serra y poblado, desde sus inicios, por comerciantes de origen catalán.
Adolf Alsina era hijo del abogado y político Valentí Alsina, nacido también en el barrio de Montserrat el año 1802 y que había sido gobernador de la provincia autónoma de Buenos Aires dos veces y presidente del Senado de la nación. Era nieto del comerciante Joan Alsina Gasa, nacido en Mataró (Maresme) el año 1769, que había llegado a Buenos Aires hacia 1790 y había combatido en la guerra de la independencia de Río de la Plata (nombre original de Argentina) como oficial de la Compañía de Migueletes de Catalunya (posteriormente Compañía de Minyons) junto a los padres de la patria argentina de origen catalán: Matheu, Larreu y Llavallol.
Adolf Alsina, durante el ejercicio del cargo de ministro de Guerra y Marina, impulsó la expansión del territorio de la joven república hacia el oeste, sobre la región denominada la Pampa, poblada por comunidades indígenas mapuches. El encuentro entre criollos (principalmente ganaderos de trashumancia) y nativos provocó ciertos conflictos, que la prensa argentina de la época denominaría "el problema del indio". Alsina, a diferencia de su sucesor Julio A. Roca (también de origen catalán), se manifestó partidario de encontrar una solución de consenso y promovió la construcción de posiciones militares defensivas que pretendían delimitar y proteger las respectivas zonas de uso y poblamiento.