El aumento del gasto destinado al Ministerio de Defensa ha sido uno de los temas más hablados de los nuevos presupuestos generales del Estado para el 2023. Desde el gobierno de Pedro Sánchez, anunciaban la semana pasada un aumento del presupuesto militar del 26%, con 12.827 millones destinados al ministerio que pilota Margarida Robles. Sin embargo, la situación real es mucho más escandalosa. Si se analizan las partidas presupuestarias de otros ministerios y organismos que de una manera u otra contribuyen a la defensa del Estado español, como la de la Guardia Civil o el Instituto Social de las Fuerzas Armadas, el presupuesto militar es todavía más desorbitado. Según los datos del Centro Delàs de Estudios por la Paz, el gasto militar real para el 2023 se sube hasta los 27.617 millones de euros.

El cálculo del Centro Delàs utiliza el criterio de la OTAN según el cual se tienen que incluir todos aquellos gastos de carácter militar como los créditos en I+D para desarrollar armamentos. Así, los gastos para las fuerzas armadas casi se duplican en comparación con las partidas directamente destinadas al ministerio del ramo.

Este aumento se enmarca en la situación bélica que se vive en Ucrania y parece que busca también cumplir el objetivo de la Alianza Atlántica de alcanzar el 2% del PIB en defensa en los próximos 5 años. Pero Pedro Sánchez se ha pasado de frenazo, y no tendrá que esperar en el 2027 para conseguirlo. "Si se aprueban estos presupuestos, España ya sobrepasará en 2023 el objetivo de gasto de la OTAN, dedicando el 2,17% del PIB a gastos de carácter militar", destaca el informe del Centro Delàs.

El gobierno de Pedro Sánchez dispara el gasto en defensa

El gasto militar real ha aumentado significativamente con respecto al año pasado: un 11,28%. Las partidas que más han salido ganando con los nuevos presupuestos del 2023 han sido las del Ministerio de Industria destinadas a la innovación I+D, que se han más que duplicado, pasando de 708,2 a 1.601,15 millones, y las del Ministerio de Defensa, que se han hinchado más de un 26%.

Este aumento, sin embargo, no es una cosa nueva de este año, sino que sigue una tendencia mantenida desde que Pedro Sánchez entró al Gobierno. Desde el 2018, el año en que Sánchez llegó en la Moncloa, el gasto militar real ha aumentado casi un 50%.

¿Qué armas comprará el ejército español?

De todos los millones destinados a defensa, casi cinco mil millones estarán destinados el año que viene a comprar armamento, más del doble de lo que está previsto que se ejecute este año - 2.298 millones. La partida, bajo el nombre de Programas Especiales de Modernización (PEM's), pretende satisfacer las necesidades de modernización de las Fuerzas Armadas, "dotándolas de los mejores sistemas de armas, equipos e infraestructuras de apoyo para el cumplimiento de sus misiones".

La mayoría de armas que se quieren adquirir con los nuevos presupuestos son vehículos militares aéreos, marinos o terrestres. La inversión mayor se la llevará la producción de aviones caza Eurofighter Typhoon y del sistema de aterrizaje con casi 620 millones de euros.

Aunque la guerra de Ucrania es uno de los argumentos para los esfuerzos económicos en defensa en todos los países miembros de la OTAN, la tendencia del Estado español a aumentar cada año el gasto militar deja claro que la obsesión militarista no viene de nuevo.

 

Imagen principal: Aviones caza F18 del ejército del aire español.