MAT. Muy alta tensión. Son unas siglas, o tres palabras, que han unido históricamente el territorio. Si en el pasado fue Girona que se alzó contra la construcción de la línea MAT al territorio, en los últimos meses y semanas son Lleida, Tarragona y parte de Barcelona las demarcaciones que se han alzado contra esta línea eléctrica. Actualmente en Catalunya hay no uno, sino tres proyectos de construcción de MAT. El primero, y más largo, uniría el municipio Barcelonés de Begues con Valmuel (Teruel), el segundo uniría el pueblo de Isona, junto a Tremp, y Laluenga, a Huesca, y el tercero volvería a unir Teruel con Ascó.

De hecho, tal es la oposición a las MAT que ha llegado al Senado, que a la vez instó en el Gobierno, el pasado 22 de septiembre, a parar por completo el proyecto. Fue a través de una moción redactada conjuntamente por el PSOE, ERC, Junts y Teruel Existe que pedía también a adoptar medidas para favorecer la implantación de energías renovables.

El texto se aprobó con 155 votos a favor 5 en contra y 101 abstenciones (PP). El texto, aparte de pedir que se parara el proyecto, también reclamaba al Gobierno que haga una "evaluación rigurosa" del proyecto y de sus impactos, así como del resto de líneas de muy alta tensión del Proyecto Sputnik y similares a Catalunya, País Valencià, Aragón y Euskadi, y los tenga en cuenta para "denegar" la autorización.

Participación del territorio

Según este mismo texto, impulsado por ERC, insta al ejecutivo español a dar valor a la participación del territorio, y tiene que minimizar el impacto paisajístico y territorial de los proyectos. Además, reclama que "se restrinja el acceso a los programas de financiación" de los fondos europeos a los proyectos energéticos que no respeten ni asuman el conjunto de compromisos con respecto a la emergencia climática y a los principios que promueve la agenda 2030.

De hecho, la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, ya admitió, también al pleno del Senado, que el proyecto de MAT entre Valmuel y Begues es "difícil de entender" porque se trata de un proyecto desproporcionado sin lógica energética y ambiental.

Si cogemos esta moción, podemos ver como los tres partidos catalanes con más representación en el congreso, PSC, ERC y Junts están en contra de estos dos proyectos, pero la cuestión no es solo política o institucional, sino que trasciende las administraciones y ha puesto el territorio en pie de guerra contra las MAT, unas construcciones que deterioran el paisaje y no ayudan a la transición ecológica, más bien todo el contrario.

MAT Valmuel-Begues

El proyecto de línea aérea de alta tensión Valmuel-Begues (400 kV) tendrá 182,22 kilómetros de longitud, con afectación en Catalunya de 140,23 kilómetros, más de 631 hectáreas. Eso comportaría la construcción de 378 torres metálicas de cerca de 90 metros de altura, 34 metros entre extremos y afectando a 55 metros de anchura de servidumbre.

Entre otras quejas, Unió de Pagesos, presentó un total de nueve alegaciones contra la MAT tanto en las Tierras del Ebro, en el Campo de Tarragona y al Àrea Metropolitana de Barcelona. UP insiste en el hecho de que la línea es nula de pleno derecho y que no quieren ni modificaciones ni replanteamiento del proyecto, sino la retirada de la propuesta de MAT, que afecta a 38 municipios. El sindicato agrario remarca la "irregularidad" del proceso y que se ha producido indefensión de los afectados y vulnerado el derecho de participación pública.

Otro ejemplo de movilización contra la MAT se producirá este domingo a varios municipios del Baix Penedès. Concretamente la plataforma ciudadana Domenys Dempeus ha organizado una 'Caminata contra la MAT' que seguirá el trayecto que tendría que tener la línea dentro del término de Sant Jaume. La salida será a las diez de la mañana desde los dos extremos del municipio, a los núcleos de Lletger y el Papiolet. Durante el recorrido habrá marcadas sobre el territorio algunas de las dieciocho torres de entre 60 y 70 metros de altura que se prevén hacer. De esta manera se podrá comprobar el impacto que tendría el proyecto en el municipio.

MAT Isona-Laluenga

En las tierras de Lleida, los municipios afectados por el proyecto, principalmente del Pallars Jussà, formalizaron un frente común en contra de la MAT en el marco del Consejo de Alcaldes del Pallars Jussà a finales de septiembre. Concretamente, los municipios acordaron presentar alegaciones al proyecto delante del Gobierno para intentar frenarlos. Ante esta situación, estos municipios recibieron el apoyo del delegado del Alt Pirineu i Aran del Govern, Ricard Pérez.

Algunas de las alegaciones girarán que presentarán los municipios en torno a las afectaciones que provoca en zonas catalogadas de interés geológico que forman parte del Geoparque Origens y que por lo tanto están sometidas a una protección especial europea. También se pondrá de manifiesto el impacto que las 56 torres que se instalarán en la comarca y el trazado de 26 kilómetros provocarán en el paisaje. Asimismo, también se alegará que algunas de las torres están proyectadas a pocos metros de zonas habitadas y de interés patrimonial.

De hecho, estos municipios han recibido esta misma semana el apoyo del presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, en contra de la MAT de 400 kV, con torres de entre 80 y 90 metros de altura separados por unos 500 metros y aseguró que "el modelo energético de la Diputación por las comarcas de Ponent i l'Alt Pirineu i Aran no pasa por la construcción de una línea de muy alta tensión". Talarn, en cambio, apostó por una transición energética hacia la energía verde que sea sostenible, ordenada y de proximidad

MAT Teruel-Ascó

En el caso de la MAT entre Teruel y Ascó tendría 45 km en total y transcurriría por los términos municipales de Caseres, Vilalba dels Arcs, la Pobla de Massaluca, la Fatarella y Ascó. Y por parte del territorio se han organizado ya varias iniciativas para demostrar el descontento de la ciudadanía como por ejemplo el grupo ecologista Gepec, que ya ha alertado de las consecuencias ambientales, paisajísticas y económicas.

Los ecologistas argumentan sobre la base que el clúster energético tendría graves repercusiones sobre la fauna amenazada y protegida –afectando, al menos, cuatro parejas de águila cuabarrada y el plan de recuperación del quebrantahuesos. También impactaría gravemente sobre seis áreas catalogadas como Espacios Naturales Protegidos –Ribera de l'Algars, Matarranya-Aiguabarreig, Riba-roja, Ribera de l'Ebre en Flix, Sierra de Pàndols y Cavalls y sierra del Montant-Pas de l'Ase.

Esta MAT forma parte del proyecto eólico impulsado en las provincias de Teruel y Zaragoza por la multinacional Green Capital Development del empresario Jesús Martín Buezas, yerno de Florentino Pérez. Prevén instalar 81 aerogeneradores de grandes dimensiones, con una potencia total de más de 500 MW, distribuidos en cuatro centrales.