El índice de precios de consumo (IPC) se situó al cierre del año en el 0,8% interanual, cuatro décimas por encima de la evolución de noviembre, por el incremento de los carburantes.

Según el dato adelantado este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el comportamiento de los precios en el final de año ha influido el alza de los carburantes, que caían en el mismo mes del año pasado y, en sentido contrario, la bajada de la electricidad.

Evolución

Tras cerrar 2018 en el 1,2 %, la inflación empezó 2019 en el 1% y la evolución de la tasa anual del IPC se mantuvo al alza hasta abril: 1,1% en febrero, 1,3% en marzo y 1,5% en abril. A partir de ahí comenzaron a moderarse las subidas: 0,8% en mayo, 0,4% en junio, 0,5% en julio y 0,3% en agosto para bajar al 0,1% en septiembre y octubre, niveles más bajos en tres años.

Los precios empezaron a recuperarse en noviembre con una tasa del 0,4% para terminar el año en ese 0,8%, el tercer repunte consecutivo en la evolución anual de los precios y la tasa más alta desde mayo que deja, no obstante, la inflación cuatro décimas por debajo del cierre de 2018.

En la evolución mensual, los precios caen un 0,1% respecto a noviembre, según estos datos avanzados que el INE publica de forma definitiva a mediados de enero.