IFM ha notificado este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ha alcanzado el 13,38% en Naturgy, lo que supone un incremento de casi el 1,3% respecto a su posición anterior en la primera gran compra del inversor australiano tras la publicación de los planes de escisión en dos de la compañía. Con este movimiento, IFM ha aumentado su paquete en Naturgy en 13 millones de acciones, hasta un total de 129.787.436 títulos de la energética. Además, los títulos de Naturgy han repuntado en la sesión de este lunes un 1,97%, hasta los 26,88 euros, con lo que la posición del fondo de pensiones australiano está valorada en casi 3.500 millones de euros.

La posición de IFM dentro de Naturgy sigue muy lejos del 22% que aspiraba a alcanzar con la oferta pública de adquisición (OPA) que lanzó en enero de 2021, aunque desde entonces, IFM ha realizado ya dos operaciones de compra de acciones, contando la de este lunes, para aumentar su peso, además de haber hecho uso de su derecho a nombrar un consejero, Jaime Siles.

Proyecto Géminis

Se trata de la primera gran compra de acciones en Naturgy, después de que el pasado 10 de febrero el Consejo de Administración de la compañía anunciase que a finales de este año Naturgy se dividirá en dos, o dicho de otra manera, el proyecto Géminis. Lo que implica  una profunda reorganización de la compañía de cara al proceso de transformación que se quiere llevar a término. Como ya hemos dicho, Géminis, en la práctica, supone la escisión de los actuales negocios de Naturgy en dos grandes empresas que mantendrán la misma composición accionarial que Naturgy y se situarían entre las primeras veinte compañías del Ibex por capitalización bursátil, según informa la misma compañía. Los dos perfiles de negocio claramente diferenciados y la idea son que permitan simplificar y focalizar la gestión de cada uno de estos grupos para acelerar el Plan Estratégico, potenciando el crecimiento y su contribución a la transición energética, adecuándolos a la realidad del sector. 

Esta división provocará que uno de los dos grupos gestione de forma integrada los negocios liberalizados que comprenden: el desarrollo de las energías renovables, la cartera de clientes de energía y servicios asociados, el parque de generación convencional que asegura el suministro energético, y la gestión de los mercados mayoristas de energía. Con unos objetivos en 2025 de más de 25 gigavatios (GW) de capacidad de generación eléctrica instalada, 11 millones de clientes, y una cartera diversificada de aproximadamente 290 TWh de aprovisionamientos de gas. Esta compañía será un referente sectorial y jugará un papel clave en la configuración de la industria y aglutinará todos los negocios dedicados a la gestión de infraestructuras reguladas de distribución y transporte de energía.