El Centro Recreativo y Turístico (CRT) de Vila-seca i Salou quedará definido el próximo noviembre con la aprobación definitiva del Plan Director Urbanístico (PDU), según el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull. "Haremos todo lo posible. Es nuestro compromiso", ha afirmado. La Generalitat tendrá en cuenta la participación del mundo local y las alegaciones, cuyo plazo de presentación concluye este 27 de septiembre, según Rull.

"A partir de ahí lo estudiamos y lo rehacemos. En noviembre estamos en condiciones de otorgar la aprobación provisional y definitiva", ha expuesto. El complejo está ubicado junto a PortAventura World. 

Seguidamente, los tres operadores preseleccionados para optar al concurso de adjudicación de los casinos –Hard Rock, Melco y Grup Peralada– dispondrán de los 90 días que solicitaron para hacer sus propuestas, sobre las que se resolverá definitivamente el concurso.

Rull mantiene el objetivo del Govern de que las obras arranquen en verano de 2017 para un proyecto que prevé una inversión de entre 2.000 y 2.500 millones de euros y 10.000 empleos cuando esté en funcionamiento.

Los trabajos de urbanización tienen una duración estimada de 18 meses. Se completarán, pues, en 2019. El periodo de edificación tiene una duración de 48 meses en dos fases, aunque será el operador adjudicatario quien concretará este calendario y el momento de abrir puertas.

El PDU está ahora en periodo de información pública. Incorpora las alegaciones presentadas durante la primera tramitación, de forma que reduce el volumen máximo de edificación respeto al PDU inicial en un 25,5% (pasa de un millón de metros cuadrados a 745.000).

El espacio destinado al juego se reduce un 50%, hasta 30.000 metros cuadrados y un máximo de dos casinos –el concurso inicial preveía hasta seis–, mientras que el techo hotelero disminuye un 29,2% hasta 425.000 metros cuadrados.

Se mantiene el techo destinado a usos comerciales (50.000 metros cuadrados) y ocio (120.000), y se rebaja la altura máxima de los edificios de 90 metros a 75 metros.

El nuevo planeamiento urbanístico también reforma el sistema de infraestructuras viarias internas y externas y separa el tráfico local del especializado (dirigido al centro turístico).

Destaca la transformación del último tramo de la autovía C-31 en vía urbana, lo que permite la integración del nuevo complejo en la estructura urbana del municipio de Salou.

También se prevé la mejora de las condiciones medioambientales a partir de la creación de conectores biológicos entre el nuevo parque del Pinar, al norte, y los espacios protegidos de la Acequia Mayor, al sur.