El ayuntamiento de Terrassa y la empresa Mina, Aigües de Terrassa, han llegado a un acuerdo de colaboración que garantizará la continuidad del servicio con un nuevo modelo de gestión a partir del próximo 10 de diciembre.

El Ayuntamiento y Mina han pactado una fórmula de gestión público-privada que, entre otros aspectos, garantiza que la empresa pondrá a disposición de la EPEL las aplicaciones informáticas necesarias para una gestión óptima del servicio, los caudales de agua o las oficinas de atención al usuario.

El acuerdo también garantiza la continuidad de los puestos de trabajo y las condiciones laborales de todo el personal de la empresa Mina.

Todos estos aspectos y otros, que se irán concretando con más detalle en las próximas semanas, deberán garantizar la prestación del servicio sin incidencias y con los máximos niveles de calidad, eficiencia, eficacia y sostenibilidad social, medioambiental y económica, según informó Mina en un comunicado.

Marià Galí, presidente de Mina, expresó su satisfacción por el acuerdo y ha agradecido al Ayuntamiento "los esfuerzos realizados para alcanzar este entendimiento".

Fin del conflicto

El entendimiento cierra el conflicto abierto entre el ayuntamiento y la empresa a raíz de la decisión municipal, aprrovada por el pleno de septiembre de 2016, de privatizar la gestión del agua y poner fin a la concesión a Mina tras una vigencia de 75 años.

El acuerdo, destacó Galí, "garantiza la continuidad del servicio respetando los acuerdos municipales y permite seguir contando con el conocimiento y la experiencia de más de 175 años de Mina al servicio de la gestión del agua de Terrassa".

Imagen: El director general de Mina, José Luis Armenter, y el presidente de Mina, Marià Galí, en conferencia de prensa