Thymen Arensman ha conseguido este sábado la victoria más prestigiosa de su carrera. El neerlandés, tras 4 horas, 53 minutos y 35 segundos, se ha coronado en la etapa reina del Tour de Francia después de erigirse en el heroico superviviente de una larga escapada con origen en el Tourmalet.

El Tourmalet reescribe el guion del Tour de Francia

El primero de los cuatro picos de la jornada ha reescrito el guion del Tour de Francia, tanto para bien como para mal. Para bien, porque ha sido el origen de la larga escapada que ha hecho de Arensman el gran vencedor del día con 1 minuto y 8 segundos de renta sobre Tadej Pogačar, que ha sido segundo, estirando en 4 segundos su cojín en la general con respecto a Jonas Vingegaard.

El danés ha atacado a poco más de 3 kilómetros para la meta, pero el esloveno le ha cogido la rueda y poco antes de alcanzar la cima del Superbagnères se ha deshecho de él para entrar segundo y ampliar de manera ligera, pero mentalmente contundente, su ventaja con el maillot amarillo. Y mientras que Pogačar y Vingegaard lideran y secundan este Tour, respectivamente, Remco Evenepoel, que llegaba a esta 14.ª etapa como el bronce de la ronda gala, ha tenido que abandonar en el Tourmalet.

El que era el maillot blanco ha tenido que mostrarlo como bandera para anunciar su retirada, exhausto y desanimado. Y es que, aunque ocupaba una posición privilegiada en este mencionado top 3, Pogačar ya le había metido nada más y nada menos que más de 7 minutos, a pesar de su gran victoria en la contrarreloj. Con la retirada del vigente campeón olímpico y mundial, el que hereda la tercera plaza es el alemán Florian Lipowitz, que luchará por sellar su posición de podio en los Campos Elíseos de París con, a día de hoy, 1 minuto y 25 segundos de cojín sobre Oscar Onley, que es cuarto.

Evenepoel: "Renunciar era la mejor opción"

A pesar de la hazaña de Arensman y el ejercicio de tesón, perseverancia y, al fin y al cabo, resistencia de Pogačar, la noticia del día ha sido un Evenepoel que ha destacado que "renunciar era la mejor opción". El belga ha bajado de la bici llorando y desesperado, falto de explicaciones y visiblemente afectado cuando ha ofrecido declaraciones: "Puedes tener un mal día de vez en cuando, pero tres seguidos no es normal. Lo tenía que dejar, también me lo dijo el director del equipo. No sé qué me pasa, no tengo ni idea, tenemos que investigarlo ahora. Todo el mundo sabe que he tenido un invierno terrible, pero... Quién sabe, quizás tenga algún problema en el cuerpo. No lo sé", concluía, preocupante.