El Real Madrid ha sumado este viernes su tercera victoria consecutiva en la Liga al superar al Celta en un partido marcado por la polémica y que ha decantado Bellingham, con un gol de cabeza en el minuto 80. El centrocampista inglés suma ya 4 goles en 3 jornadas y certifica su espectacular inicio como jugador del Real Madrid. Todo podría haber sido muy distinto si nada más empezar el partido el árbitro no le hubiera anulado un gol al Celta por una supuesta falta sobre Kepa, que debutaba como portero madridista. Y la polémica no ha terminado ahí, ya que en la segunda parte, con 0-0 en el marcador, Rodrygo ha fallado un penalti, una decisión muy controvertida, ya que en la repetición se aprecia como el portero del Celta, Iván Villar, toca el balón antes de derribar al delantero del Real Madrid.
Una de las dudas de la alineación de Carlo Ancelotti era ver si le daba la titularidad o no a Luka Modric, suplente en los dos primeros partidos de Liga, una situación incómoda para el croata, como el italiano admitió en la rueda de prensa previa. Y Ancelotti ha vuelto a dejar a Modric en el banquillo, apostando por Tchouaméni, Camavinga, Valverde y Bellingham para el centro del campo. La otra duda, quién defendería la portería, ya había quedado resuelta en la misma rueda de prensa, en la que Ancelotti admitió que Lunin le iba a dejar el puesto a Kepa, el fichaje realizado por el Real Madrid para cubrir la lesión de Courtois.
Gol anulado al Celta y lesión de Vinícius
El Celta ha empezado el partido imponiendo un ritmo eléctrico, presionando la salida de balón del Real Madrid y buscando ataques verticales por las bandas. Y en el minuto ha encontrado el premio, con un gran gol de Larsen, que ha desviado con el tacón un disparo de Fran Beltrán. El VAR ha avisado al árbitro, al considerar que Larsen había agarrado a Kepa en el lanzamiento del córner previo al gol. El agarrón es mutuo y en ningún caso parece ser suficiente para desestabilizar al portero vasco, que había cometido un error de bulto en su primera acción como portero del Real Madrid. Aún y así, y ante la estupefacción de Balaídos, Díaz de Mera ha anulado el gol.
La acción ha afectado al Celta, que ha bajado un punto la intensidad, mientras que el Real Madrid, con el susto en el cuerpo, ha empezado a buscar a Vinícius por la banda izquierda. El brasileño, sin embargo, ha notado un pinchazo en el muslo en una de sus primeras carreras, lo que ha provocado que tuviera que ser sustituido, por una lesión muscular (17'). En el minuto 23, un disparo de Mingueza ha salido por poco fuera tras rebotar en Rüdiger, mientras que poco después ha sido el turno del Real Madrid, con un disparo de Fede Valverde que ha despejado Iván Villar (26'). La ocasión más clara del Madrid ha sido para Rodrygo, que ha visto como Starfelt desviaba su disparo después de una acción individual espectacular. La réplica del Celta la ha protagonizado Bamba, que ha terminado con un disparo ajustado un excelente contraataque del Celta.
Bellingham, de nuevo decisivo
El Real Madrid ha empezado bien la segunda parte, asfixiando al Celta gracias al potencial físico de su centro del campo. Fede Valverde ha podido marcar el 0-1, después de una gran combinación del conjunto blanco, pero su disparo ha salido fuera. La respuesta del Celta ha sido para Larsen, que con todo de cara para marcar ha disparado desviado (64'). Y acto seguido ha llegado la segunda jugada polémica del partido. Rodrygo se queda solo ante Iván Villar, que lo derriba al intentar evitar que lo regatee. El árbitro pita penalti, pero en la repetición se aprecia como el portero toca el balón. Aún y así, el VAR confima la decisión de colegiado. Rodrygo, sin embargo, ha visto como Villar le paraba el lanzamiento.
El partido estaba llegando a su final y el 0-0 seguía inamovible, un empate insuficiente para el Real Madrid, que en una jugada de estrategia ha encontrado el gol. El 0-1 ha llegado en un córner, una acción de pizarra que Bellingham ha rematado al fondo de la portería. Tercera victoria para el Real Madrid y tercer partido en el que el centrocampista inglés ha sido decisivo.