El mercado vuelve a sacudir al Barça con una propuesta de gran calibre procedente de París. El PSG ha puesto sobre la mesa una oferta de 50 millones fijos más 15 en variables por Ferran Torres, una operación impulsada directamente por Luis Enrique. Sin embargo, la respuesta desde el Barça ha sido inmediata y contundente porque no está en venta.
Hansi Flick ha bloqueado personalmente cualquier posibilidad de salida. El técnico alemán considera a Ferran un jugador estructural dentro de su idea de equipo y no está dispuesto a debilitar la plantilla en un punto clave del ataque. En el Barça asumen que la oferta es importante en términos económicos, pero el debate no ha llegado ni a abrirse.
Flick lo considera intocable en su proyecto
Y es que la realidad es que Ferran Torres se ha ganado un estatus especial con Flick. El alemán valora especialmente su disciplina táctica, su capacidad para jugar en varias posiciones del frente ofensivo y su compromiso defensivo, algo que considera irrenunciable en su Barça. Ferran puede actuar en banda, como falso nueve o incluso acompañando al delantero, y siempre responde.
De este modo, Flick ha sido muy claro con Deco y con la directiva. No quiere venderlo bajo ningún concepto. El técnico cree que Ferran está entrando en su madurez futbolística y que todavía no ha mostrado su mejor versión con continuidad, algo que espera explotar esta misma temporada. Además, dentro del vestuario es un jugador muy bien valorado. Su rol, lejos de generar problemas, ha sido siempre ejemplar, aceptando decisiones y respondiendo cuando le toca jugar. Un perfil que Flick considera clave para mantener el equilibrio interno del grupo.
Luis Enrique insiste, pero el Barça no negocia
Desde París, Luis Enrique sigue presionando. En el PSG están convencidos de que Ferran encajaría a la perfección en su sistema, aportando movilidad, gol y lectura colectiva. Consideran que su fichaje sería una oportunidad de mercado y creen que la oferta presentada es más que suficiente para abrir una negociación. Sin embargo, en el Barça el mensaje es unánime. No se trata de dinero, sino de mantener vivo el proyecto.
El PSG puede insistir todo lo que quiera. Flick ya ha marcado territorio y ha dejado claro que Ferran Torres no se vende. Ni por 50, ni por 65 millones. En el Barça consideran que su valor deportivo es superior a cualquier cifra. Así pues, salvo giro radical, Ferran seguirá siendo azulgrana. Y Flick, firme, vuelve a imponer su criterio.