El Paris Saint-Germain es el nuevo campeón de Europa. El conjunto francés, dirigido por Luis Enrique Martínez, se ha impuesto al Inter de Milán en la final de la Champions League 2024/25 disputada en el Allianz Arena de Múnich (5-0). Y de esta manera, el proyecto multimillonario del PSG por fin consigue su tan deseado gran título europeo gracias a los goles de Achraf Hakimi, de Khvicha Kvaratskhelia, de Senny Mayulu y del doblete de Désiré Doué. Y también se ha confirmado que es la mayor paliza en una final de la máxima competición europea.

Achraf Hakimi y Doué dan medio título al PSG

Una final es una final y siempre genera muchas tensiones. Y se ha visto desde el principio y hasta el minuto 10, cuándo los dos equipos se han ido tanteando e intentaban no cometer errores. El PSG, sabiendo que tenía un mejor equipo y que tenía que tomar la iniciativa, ha empezado el dominio abrumador ante un Inter perdido y sin rumbo. Ocasiones de Dembélé y Doué para asustar a los italianos. Y ya en el minuto 12, después de una jugada de tiralíneas muy precisa de los franceses, Achraf ha marcado el primer gol a placer después de una asistencia perfecta del joven Doué (1-0), y celebrando mientras pedía perdón por haber marcado a su exequipo.

Achraf Hakimi PSG / Foto: EFE
Achraf Hakimi pidiendo perdón después de marcar / Foto: EFE

Un plan de partido perfecto para los de Luis Enrique Martínez, que ha apostado por su equipo de gala y por unos jugadores que sabían como mover el balón para marear al Inter. Y es que el conjunto italiano, sin parecerse nada a aquel equipo temible que asustó al Barça, se ha empezado a desesperar. Tomando muchos riesgos en defensa, sin participación de su medio del campo y con un ataque totalmente desaparecido. Y, mientras tanto, el PSG ha seguido atacando y generando peligro, sobre todo gracias a Doué, incombustible, igual que un Dembélé omnipresente.

Un PSG que ha merecido el segundo gol y lo ha conseguido en un contragolpe perfecto en el minuto 20. Dembélé ve a Doué libre de marca, y el joven francés marca con la fortuna de un rebote en la pierna de Dimarco (2-0). Sin sufrir más, con un control total y absoluto del balón, los parisinos se lo han empezado a pasar muy bien. El esférico se movía de lado a lado, pasaba por todos los futbolistas, siempre con inteligencia y la calma de saber que iban un paso por delante del Inter. Y antes del descanso, cuando los franceses han tenido la sentencia, ha llegado la clásica dembelada que los culés recuerdan muy bien, enviando el balón a la banda cuando ha intentado un disparo desde dentro del área pequeña y a escasos centímetros de la línea de gol.

Ousmane Dembélé PSG Inter / Foto: EFE
Ousmane Dembélé fallando la ocasión infallable / Foto: EFE

Doué decide la final de la Champions League

Pero si el Inter ha querido dar un paso adelante al inicio del segundo tiempo, haciendo correr a sus futbolistas y descolocándose para generar un poco de desconcierto en el PSG, no lo ha acabado de conseguir. Los italianos han perdido todavía más el rumbo del partido y han confirmado que no jugaban a nada. El mérito del PSG ha sido el de saber controlar estos momentos de descontrol y también el de controlar a Marcus Thuram, el único jugador que parecía querer y poder remontar. Además, Bissek que acababa de entrar por parte del Inter, ha abandonado el campo después de 6 minutos al sufrir una lesión muscular.

Y como el Inter tenía muchos recursos destinados al ataque, en uno de los contragolpes del PSG ha llegado la sentencia. Minuto 63, genialidad de Dembélé y doblete de un Doué que se ha erigido en la gran estrella de la final (3-0). Un partido y un título ya decidido, y que todavía se ha reconfirmado más con el gol de Kvaratskhelia en el minuto 73 en un nuevo contragolpe del PSG (4-0), y con el último del joven francés Senny Mayulu (5-0).

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Désiré Doué celebrando uno de sus goles contra el Inter / Foto: EFE

Sin nada más que añadir, ni con el acierto del Inter cuando ha buscado el gol del honor a la desesperada. El PSG, después de hacer una desastrosa fase de liga, finalmente ha acabado levantando su primera Champions League. Y ya le pueden dar las gracias al siempre inconformista y trabajador Luis Enrique, capaz de prescindir de las grandes estrellas para construir un equipo ganador que ha conseguido el póquer de títulos esta temporada.