Nadie esconde que Paul Pogba es el objetivo número 1 del Real Madrid este mercado de verano. Después de los fichajes de Eder Militao, Luka Jovic, Eden Hazard y Ferland Mendy; ahora Florentino Pérez pretende contentar a Zinedine Zidane con el mediocampista del Manchester United, un jugador que sería la guinda del pastel de su macroproyecto.

Pogba llegó a Old Trafford hace tres temporadas procedente de la Juventus, pero ahora considera que es el momento de hacer un cambio de aires. Pogba ya había reconocido anteriormente que le seducía la idea de ser entrenado por Zidane -su ídolo y compatriota- pero ahora el futbolista ha dado un paso más en una gira comercial en China.

"Después de esta temporada creo que podría ser un buen momento por tener un nuevo reto en otro lugar", ha asegurado en declaraciones en el The Guardian. "Lo he estado haciendo muy bien durante tres años en Manchester, viviendo buenos y malos momentos como todo el mundo", ha explicado.

Sus palabras son una declaración de intenciones. Florentino Pérez probablemente no podrá traer a Kylian Mbappé al Bernabéu, pero otro campeón del mundo como Pogba cada vez se moja más para vestir de blanco.