Este 28 de octubre se cumplen 74 años de un día que fue histórico para el automovilismo catalán. El entonces Circuito de Pedralbes se convirtió en carrera puntuable del Mundial de Fórmula 1, siendo el primer Gran Premio de España, y donde el barcelonés Francisco 'Paco' Godia hizo historia en la emergente competición de bólidos.
El Circuito de Pedralbes, pionero en la Fórmula 1
Para ponernos en contexto, debemos entender que estamos hablando del año 1951, justo en la segunda temporada del campeonato de F1 tal como la conocemos a día de hoy, y cuando las carreras no eran de tantos fines de semana como ahora. El Circuito de Pedralbes, ya presente en 1950, en la primera edición de la competición, pero no fue puntuable y oficial hasta el segundo año, y se convirtió en decisoria del campeón de aquella temporada.
El Circuito de Pedralbes estuvo en funcionamiento entre 1946 y 1954, gracias a la Peña Rhin, un club automovilístico y motociclista barcelonés, activo entre 1916 y 1954. En este trazado de entonces a las afueras de la ciudad de Barcelona, recorría la avenida Diagonal (avenida del Generalísimo Franco), la calle Numancia, el paseo Manuel Girona, la avenida Pedralbes (avenida de la Victoria) y la avenida de Esplugues (carretera de Cornellà a Fogars de Tordera). Todo esto, formando un recorrido de 6,3 kilómetros y lleno de largas rectas.
Aunque se celebraron muy pocas carreras en el Circuito de Pedralbes, de las cuales dos fueron puntuables en la F1, se convirtió en un trazado moderno y competitivo. Al final, debido a los accidentes automovilísticos de las pruebas urbanas y a la peligrosidad por la proximidad del público, el trazado acabó desapareciendo, dando paso al famoso Circuito de Montjuïc, estrenado unos años más tarde en la Fórmula 1.
Paco Godia, historia del automovilismo catalán y español
Pero el nombre propio de aquel día, aparte del debut oficial del circuito en la emergente competición de coches, fue el de Paco Godia. Aquel 28 de octubre de 1951, en la carrera que se corría en el trazado barcelonés, la octava y última del campeonato de F1, el argentino Juan Manuel Fangio y el italiano Alberto Ascari se disputaban el título de campeón. Y aunque el piloto de Balcarce hizo historia ganando su primer campeonato de los cinco que consiguió, fue un catalán quien también hizo historia en su casa.
Godia, que corrió aquella carrera en Pedralbes, se convirtió en el primer piloto catalán y español en disputar una carrera de la F1. A pesar de acabar en décima y última posición al volante de un Maserati, fue pionero en la competición que años más tarde se convertiría en la más importante del mundo del automovilismo.
El también catalán Joan Jover fue el otro que podría haber hecho historia en la F1, pero finalmente no pudo debutar aquel día por problemas en el motor de su Maserati.