El Gresini Racing Team vivió con total seguridad su mejor fin de semana. Porque el sábado no pudo comenzar de manera más positiva, gracias al podio en la Tissot Sprint de Àlex Márquez y de Fermín Aldeguer, si bien el murciano acabó siendo sancionado por la normativa de presiones del neumático, cediendo su puesto a Pedro Acosta. A pesar de esto, el ‘54’ se aseguró el premio al mejor ‘rookie’ del año, gracias a las fantásticas actuaciones que ha completado.
No hay que olvidar que logró ganar una carrera larga en el Gran Premio de Indonesia, y se convirtió en el segundo piloto más joven en la historia de MotoGP en conseguirlo, con 20 años, únicamente por detrás de Marc Márquez. Y el gran día para Nadia Padovani llegó el domingo, pues el ‘73’ consiguió una nueva victoria, la tercera esta campaña, y se proclamaron matemáticamente como el mejor equipo independiente de la temporada, heredando el trono del Prima Pramac Racing.

Sin olvidar que el de Cervera se aseguró el subcampeonato, aunque ya estaba virtualmente garantizado, por la diferencia de puntos que tenía sobre Marco Bezzecchi. Es el mejor resultado del piloto catalán en la categoría reina, y también, el de un piloto de la estructura fundada por Fausto Gresini, superando el tercer puesto que Enea Bastianini consiguió en el año 2022, y que igualó el ‘93’ el año anterior, antes de firmar por el Ducati Lenovo Team, como hizo ‘La Bestia’.
Todo era felicidad en Gresini, y debían de ser caras de alegría. Pero la realidad es que existe preocupación con la situación del pequeño de los Márquez. Y es que, como es lógico, no ha dejado de recibir propuestas debido al año tan impresionante que ha realizado, y la regularidad que ha exhibido, confirmándose como un verdadero aspirante al campeonato de 2026. Porque ya ha sido tentado por fábricas con el potencial de KTM, Aprilia, y, en especial, Yamaha.

Se han interesado por Àlex, y pretenden aprovechar que queda libre a finales del siguiente curso para cerrar su contratación de cara a 2027.
Gresini no puede aumentar su oferta a Márquez
Como es evidente, en Gresini están encantados con Márquez, e intentarán hacer todo lo posible para retenerlo. Y, al menos, han conseguido que en la próxima campaña pueda tener una moto oficial, la Demosedici GP 26, la misma que tendrán Francesco Bagnaia, Fabio Di Giannantonio, y por supuesto, su hermano grande, Marc.
Pero Padovani no puede pagarle a Àlex el sueldo que exige, aunque se lo merezca, pues actualmente percibe menos de un millón de euros al año.