Partido clave para un José Mourinho que rendía cuentas ante Old Trafford después de encadenar tres derrotas consecutivas y ganar sufriendo a un equipo de la Tercera División inglesa. El Manchester ha pasado por encima del vigente campeón, el Leicester City, para firmar la victoria más amplia de la temporada con el mejor fútbol del curso.

Mourinho ha sacudido el equipo buscando soluciones. Y los cambios han respondido como se esperaba. El portugués ha dejado en el banquillo Wayne Rooney y Marouane Fellaini para dar entrada a Juan Mata y Ander Herrera. Dos españoles le han cambiado la cara al United. Después de un inicio dubitativo, los de Manchester han explotado todo su potencial ofensivo, adormecido hasta ahora.

La estrategia decide

La pelota parada le ha dado la vida al United. Hasta 3 goles ha conseguido de córner. Smalling, Rashford y Pogba han castigado la indolencia de un Leicester que sólo conserva el nombre del equipo que consiguió la mayor gesta del fútbol moderno. Mata también se ha añadido a la fiesta con el mejor gol del partido después de una combinación con Jesse Lingard. Y todo eso en la primera parte.

45 minutos y 4 goles. La mejor reacción a un inicio dubitativo. Contra el Leicester y a Old Trafford, el Manchester ha recuperado el camino que lo puede llevar a luchar por los títulos. Sin una gran exhibición, la clarividencia ofensiva de los red devils ha marcado la diferencia.

La segunda parte ha sido un puro trámite. Los de Mourinho han bajado el ritmo con el partido más que decidido. El gol del honor del Leicester lo ha marcado Demarai Gray con un disparo que se ha colado por la escuadra de De Gea. El contundente resultado final es una bombona de oxígeno para un equipo que necesita crecer en confianza. Y hoy lo ha hecho. A base de goles.