Michel Sánchez ha mostrado públicamente su decepción con la planificación de plantilla que ha realizado el Girona este verano. Ha perdido a piezas clave como Miguel Gutiérrez o Ladislav Krejci, quien próximamente se incorporará al Wolverhampton Wanderers, y los refuerzos que han llegado no le han convencido. De hecho, cree que es necesario realizar cuatro incorporaciones más para poder aspirar a conseguir la permanencia en La Liga EA Sports.

Es evidente que la plantilla se ha debilitado considerablemente, sobre todo, en comparación a hace dos años, cuando lograron dar la sorpresa, y convertirse en la gran revelación del fútbol europeo, clasificándose por primera vez en su historia a la Champions League. El técnico madrileño cree que a la plantilla le falta nivel competitivo, y tampoco está satisfecho con la actitud que han mostrado algunos de sus futbolistas.
Por esa razón, no ha dudado en realizar unas declaraciones incendiarias en la rueda de prensa, después de ser humillados por el Villarreal, con un contundente cinco a cero en el marcador. “La imagen fue muy mala. Cuando no compites al cien por cien, un equipo de Primera y del nivel del Villarreal te pasa por encima. Eso pasó. Jugamos por el orgullo y el respeto de la gente y no hicimos el trabajo que debíamos. Para formar un equipo hay que querer y hemos de empezar a querer” comenzó diciendo.
Pero la peor parte vino después, cuando aseguró que “les dije que me sentía decepcionado. Seguro que la responsabilidad es mía de lo que pasa, pero hago las cosas para dar el máximo rendimiento. Pienso en mi gente. No me siento representado por los jugadores, es duro y muy fuerte. Cuando uno siente que no estamos como equipo duele mucho y eso lo he sentido en el campo”. Y esto ha tenido consecuencias en el vestuario de Montilivi.
Varios futbolistas han mostrado su enfado con Michel por estas palabras, que desafían claramente al equipo, y que creen que no ayudan en nada a mejorar el ambiente que se respira, que ya es lo suficientemente tenso.
Quique Cárcel y Delfí Gelí, señalados por Michel
Sin embargo, Michel no ha querido cargar toda la responsabilidad únicamente en los jugadores. Y también ha tenido sus diferencias con Delfí Gelí, presidente de la entidad, y Quique Cárcel, director deportivo del Girona.

Porque cree que ellos tampoco han hecho sus deberes.