El Barça gana, el Barça ilusiona y el Barça vuelve a ganar un título. La Supercopa de España vuelve a ser culé después de la exhibición que se hizo en Arabia Saudí contra el Real Madrid. Un nuevo trofeo después de una larga sequía. Y el club blaugrana se vuelve a sentir poderoso. Y en gran parte es gracias a Robert Lewandowski y a su gran capacidad para ser determinante en los momentos clave.
Lewandowski tiene nuevos socios en el Barça
Lewandowski tiene conexión con todos sus compañeros porque es un futbolista diferencial en todos los sentidos. Da igual que a su lado juegue Pablo Gavi, Ousmane Dembélé, Pedri González o quien sea, ya que siempre mejora el rendimiento del equipo y hace mejor a sus compañeros.
Y Xavi Hernández ha encontrado el ecosistema perfecto para Lewandowski. El nuevo esquema utilizado en la Supercopa de España lo vuelve a hacer letal en el área y también fuera de ella. El delantero polaco genera juego, interviene en las jugadas y tiene ocasiones para marcar goles. Todo va a favor de Lewandowski.
Y contra el Real Madrid se confirmó una nueva asociación increíble. Lewandowski fue el socio perfecto de Gavi, que fue el MVP de la final. Pero es que entre los dos acabaron destrozando a un Real Madrid atónito y destrozado. El Barça hizo lo que quiso y fue el justo vencedor del título en Arabia Saudí.
Ansu Fati y Raphinha necesitan mejorar
Pero es que esta nueva situación también ha generado que otros futbolistas puedan tener problemas a partir de ahora. La fórmula de jugar con cuatro centrocampistas y que uno de ellos haga de extremo izquierdo perjudica los que presuntamente tienen que actuar en esta posición.
El caso es que indirectamente Lewandowski ha mandado a la nevera hasta a dos futbolistas del Barça. Si miramos a los extremos culés, solo Dembélé es titular indiscutible para Xavi Hernández. Todo el mundo sabe que Ferran Torres ya es el último de los elegidos. Y mientras Ansu Fati y Raphinha se siguen jugando la titularidad, también contra el Real Madrid, pero ahora ven que tienen una nueva competencia.
Por lo tanto, Ansu Fati y Raphinha se quedan en la nevera hasta que este nuevo plan de juego no caduque. Y no podrán bajar el ritmo porque a la mínima que Xavi los necesite tendrán que aportar rendimiento desde el primer minuto. De momento, sin embargo, tendrán que esperar su turno desde el banquillo.