Jordi Fernández es el primer entrenador catalán de la historia de la NBA. Actualmente, dirige los Brooklyn Nets y, en rueda de prensa, no ha escondido el orgullo que siente por sus raíces. Con 43 años y una carrera marcada por la experiencia internacional, Fernández utiliza cada oportunidad para mostrar quién es y de dónde viene: “Es muy importante, porque son tus raíces, cómo te has criado. Hablo catalán con mis hijos, celebramos Sant Jordi… son cosas que para mí son esenciales. Evidentemente, mi primera lengua es el catalán, el idioma con el que hablo con la familia y mis padres”, asegura el técnico, que recientemente visitó una escuela primaria de Brooklyn para celebrar la festividad catalana con rosas y libros después de leer un cuento a los niños.
Un catalán en Nueva York
A pesar de vivir en Nueva York con su esposa americana y sus hijos, Fernández no olvida Badalona, ciudad donde empezó a jugar y entrenar y que considera uno de los centros más importantes de baloncesto del mundo. “Siempre llevo a Catalunya conmigo, a donde voy. La cultura catalana y española es fundamental, y siempre intento transmitirlo a todo el mundo con quien trabajo, sobre todo cuando tienes la oportunidad de hacerlo desde una posición como la mía”, explica durante la visita de pretemporada de los Nets a Toronto. Para él, la NBA no solo es un reto deportivo, sino también cultural: “Mi trabajo me ofrece una plataforma para mostrar la riqueza de la cultura catalana. Desde el catalán que hablo en casa, hasta las tradiciones como Sant Jordi que celebro en Nueva York, intento que mis hijos y todo el mundo que me sigue conozca quiénes somos. Es una manera de llevar Badalona conmigo y de recordar mis raíces cada día”, asegura Jordi Fernández, orgulloso de combinar su compromiso profesional con su identidad.
🌹📚Jordi Fernández, orgullo catalán en la NBA
— Esport3 (@esport3) October 18, 2025
🏀 El técnico de Badalona hace bandera de sus raíces catalanas desde el banquillo de los Brooklyn Nets
Un equipo en construcción
El equipo que entrena, los Nets, el más joven de la NBA, están en plena reconstrucción y Fernández ha destacado la importancia de formar jugadores desde la base: “Este proyecto es construir desde las raíces, como aprendí en la Penya. Todo lo que he aprendido de los entrenadores con los que he trabajado, especialmente en la NBA, tiene un gran impacto en cómo gestiono mi equipo hoy. Primero te tienes que adaptar a la liga y después utilizar todo lo que has aprendido en tu carrera”, afirma.
El técnico catalán también reflexiona sobre los retos humanos de su trabajo. “Aprendes cada día y en un trabajo así es difícil estar preparado al 100%. Mucha gente depende de ti y tienes que tratar con todo el mundo cada día. No puedes hacerlo todo tú solo; la delegación y la gestión del grupo son fundamentales. Esto es lo que te permite mantener un equipo cohesionado, especialmente con un grupo joven y en evolución”, dice. Fernández reconoce que lo más importante es mantenerse fiel a sí mismo y a sus valores. “En esta posición te das cuenta de que mucha gente depende de ti. Este año me siento mucho más cómodo con mi grupo, los jugadores, la dirección técnica y los propietarios. Esto me da seguridad, pero mi proceso continúa”, admite.