Con apenas 18 años recién cumplidos, Lamine Yamal ya es mucho más que una promesa en el FC Barcelona: es el rostro visible del nuevo proyecto deportivo y, ahora también, del eje comercial de la entidad. Aprovechando el enorme impacto mediático y deportivo del joven extremo tras su explosión en la Eurocopa y su gran temporada con el primer equipo, el club ha activado una nueva fórmula empresarial que promete generar ingresos sin necesidad de vender activos.

El Barça ha constituido una sociedad instrumental llamada Bridgeburg Invest, pensada para gestionar y explotar comercialmente los derechos de imagen de sus principales estrellas. En este caso, Yamal será el primer gran activo que servirá como palanca económica en esta estructura. Con campañas publicitarias, acuerdos con marcas globales y un tirón imparable entre los jóvenes, la figura del canterano de La Masia se convierte en un valor estratégico y financiero para un club que sigue navegando con restricciones por el ‘fair play’ de LaLiga.

Lamine Yamal Europa Press
Lamine Yamal Europa Press

Lamine Yamal, la joya que ya brilla en Europa

Lo de Lamine Yamal ya no es futuro: es presente rotundo. Tras un curso 2024/25 en el que fue el jugador más determinante del equipo, con más de 15 goles y 10 asistencias, y después de proclamarse campeón de Europa con España siendo uno de los mejores del torneo, su imagen ha adquirido una dimensión global. En Alemania, marcó goles decisivos, deslumbró por su madurez táctica y fue elegido Mejor Jugador Joven de la Eurocopa 2024.

El Barça ha sabido reaccionar con celeridad, blindándolo con una cláusula de 1.000 millones de euros y ahora, impulsando esta nueva vía comercial. Bridgeburg Invest, controlada al 100% por el club, busca canalizar ingresos mediante acuerdos con patrocinadores vinculados a las figuras emergentes. Y Lamine es, sin lugar a dudas, el activo más rentable, no solo en lo deportivo, sino en lo económico.

Laporta evita ventas y gana margen financiero

Esta operación representa una evolución respecto a las famosas 'palancas' de 2022, que implicaban la venta de derechos televisivos o de Barça Studios. En este caso, no se pierde patrimonio ni se hipotecan activos. Laporta pretende que Bridgeburg funcione como una herramienta para generar beneficios contables inmediatos, cumpliendo los criterios de LaLiga y mejorando el margen de inscripción de nuevos fichajes.

Lamine Yamal
Lamine Yamal

El modelo se basa en la explotación directa de las figuras clave del equipo, con un enfoque más moderno y controlado. Desde los despachos del Camp Nou confían en que esta fórmula se consolide como un recurso estructural, no solo coyuntural. La apuesta por Lamine Yamal no es únicamente deportiva, sino también estratégica: representa el ADN Barça y a la vez, una fuente de ingresos recurrente en un contexto donde los derechos de imagen tienen un valor cada vez más elevado.

El Barça no vende a su estrella, la convierte en su motor económico. En un entorno en el que los clubes buscan fórmulas innovadoras para competir sin vulnerar las normas financieras, esta nueva palanca basada en la figura de Yamal puede marcar el camino de una gestión más sostenible y ambiciosa.