En los despachos del FC Barcelona, una operación silenciosa empieza a tomar forma con un claro objetivo: fichar a Joan García, el portero revelación del Espanyol. A sus 24 años, el guardameta catalán ha sido uno de los nombres propios de la temporada, consolidándose como una de las grandes promesas en su posición y despertando el interés de varios clubes, tanto en España como en el extranjero. Pero es el Barça, y especialmente su presidente Joan Laporta, quien está más decidido a dar el paso.
Desde la dirección deportiva culé consideran que no hay urgencia inmediata. Ter Stegen sigue siendo titular indiscutible, pero con 33 años empieza a verse la necesidad de un relevo generacional. Además, la situación de Szczesny, que llegó como refuerzo temporal, es incierta. El polaco tiene sobre la mesa una oferta de renovación, pero su continuidad no está asegurada. Y Iñaki Peña no termina de convencer como portero de garantías para el futuro.
Joan Laporta quiere a Joan García como relevo de Ter Stegen
En este contexto, Joan García es el favorito para realizar un relevo generacional. García ha demostrado un rendimiento excepcional en LaLiga, con actuaciones que han salvado puntos clave para el Espanyol. Su agilidad, juego con los pies y personalidad bajo palos lo han colocado en el radar de los grandes. Y en el Barça, que ya piensa en el futuro tras un año de transición, consideran que podría ser el heredero natural de Ter Stegen.
El problema es el de siempre: la rivalidad histórica entre Barcelona y Espanyol, que convierte cualquier movimiento entre ambos en un asunto espinoso y emocional. En este contexto, Laporta ha diseñado un plan para rebajar la tensión: fichar ahora al jugador pero dejarlo cedido una temporada más en su actual club. Con esto, el Barça asegura su fichaje, el Espanyol retiene a su portero estrella durante otro año, y el impacto mediático de la operación se diluye con el tiempo. El problema aquí es la hostilidad con la que el guardameta podría ser recibido en Cornellà-El Prat.
Joan García tendrá la última palabra
Para Joan García, fichar por el Barça sería un paso gigante. Aunque su contrato con el Espanyol se extiende hasta 2028, sabe que su progresión lo empuja a retos mayores. Sin embargo, también entiende lo que representa cambiar de casa en Barcelona. La afición del Espanyol ya ha mostrado su incomodidad ante los rumores, y la directiva blanquiazul preferiría venderlo a la Premier League, donde varios clubes le siguen de cerca.
La decisión final, no obstante, estará en manos del propio jugador. Si Joan apuesta por el Barça, el Espanyol poco podrá hacer más allá de negociar la mejor salida posible. Y si la propuesta económica es atractiva, y el plan deportivo incluye un año más de protagonismo como titular, la salida se hará inevitable.