Iñigo Martínez ha puesto rumbo al Al-Nassr. El central vasco, que fue una de las piezas fundamentales del Barça la temporada pasada, ha hecho las maletas hacia Arabia Saudí en una decisión inesperada. Ahora, el defensa ha hablado a Onda Vasca, donde, entre otros temas, ha comentado su decisión de marcharse del club blaugrana.
Martínez reconoce que la noticia ha cogido a muchos aficionados culés por sorpresa. "A muchos los cogió a contrapié. Además, a la afición le entré bien, generé ilusión y, al final, marcharse les sorprendió. Pero son cosas del fútbol y hoy día estamos acostumbrados a cambios de un día para otro", ha explicado. El factor económico ha sido determinante en su decisión: "Económicamente, hoy día no se puede comparar esta liga con ninguna otra. Viendo mi trayectoria y lo que había conseguido, era el momento de dar el paso. La carrera de un jugador es corta: tengo 34 años y estos trenes pasan una vez, si es que pasan, y es complicado decir que no". El vasco reconoce que la oferta recibida fue impactante: "Cuando ves la propuesta, ni te lo crees: nadie está preparado para eso. Yo había sido un peón en el fútbol, y hay que estar para saber lo que es una oferta así".

"Lo entendió desde el primer momento"
La decisión también cogió por sorpresa a Hansi Flick. "Hablé con él en la vuelta de la gira, porque tampoco quería añadir más cosas a lo que ya estaba pasando. En Barcelona le fui sincero, porque sabía que me entendería perfectamente. Me quedaba un año de contrato y, con 34 años, estas opciones pasan pocas veces. Le sorprendió, pero lo entendió perfectamente desde el primer momento. Fue una conversación agradable, con mucha emoción, y me supo muy mal porque había un afecto mutuo. Estuvo triste, pero no tenso; era el momento de decir adiós y sabía cómo era de importante para él".
A pesar de haber estado a gusto en el club, el central admite que, con un contrato más largo, quizás habría continuado: "Seguramente me habría planteado seguir si hubiera tenido más años de contrato. Mi sueldo era importante y estábamos bien. No es fácil tomar esta decisión, no solo para arrastrar a mi mujer, sino también a mis hijos; todo cambia. Quizás me lo habría pensado más, sí".

"Me apetecía estar en el nuevo Spotify Camp Nou"
El adiós del vestuario fue especialmente emotivo: "Mantuve la compostura porque me conozco, pero por dentro estaba afectado, y los compañeros también lo estaban. He tenido una salida excepcional, siempre me han dado apoyo. No fue fácil al principio por las lesiones, pero después remonté con creces. En poco tiempo gané mucho afecto. No es la cantidad de tiempo, sino la calidad". Como única espina, lamenta no poder jugar en el nuevo estadio: "La única espina que me queda es no poder conocer el nuevo campo: me apetecía estar en el nuevo Spotify Camp Nou y verlo".
Finalmente, también ha hablado sobre el "no" de Nico Williams al Barça. "Todo el verano estuvimos insistiendo con él y, al final, ha decidido quedarse. Me alegro si era la decisión que quería tomar. Es un gran jugador y una persona espectacular. Nos habría encantado tenerlo en Barcelona, pero le deseo que le vaya bien y vuelva a ser el Nico de siempre".