En el Real Madrid se respira un profundo ambiente de tensión en la portería. Lo que parecía un escenario estable se ha convertido en un foco de tensión. El protagonista de esta historia es Andriy Lunin, el guardameta ucraniano que atraviesa uno de sus momentos más delicados desde que llegó al club blanco.
Durante meses, Lunin había aceptado su papel a la sombra de Thibaut Courtois, sabiendo que el belga es el dueño absoluto del arco. Pero ahora, con Xabi Alonso en el banquillo, la situación ha cambiado por completo. El técnico no termina de confiar en él. No le ve como un portero de futuro para el Santiago Bernabéu, y eso ha encendido la mecha del descontento.
Lunin no cuenta para Xabi Alonso
En realidad Lunin ya sufrió una enorme decepción hace dos temporadas. Durante la lesión de larga duración de Courtois, fue titular todo el curso y dio un rendimiento notable. Todo indicaba que sería titular en la final de la Champions League. Siun embargo, el belga se recuperó a tiempo y Carlo Ancelotti decidió darle la titularidad, pese a no llevar ritmo de competición. Lunin había merecido jugar, pero la jerarquía se impuso a los méritos.
Ahora, Lunin, con 26 años, siente que ha hecho méritos para ser tenido en cuenta. Ha respondido bien cada vez que se le ha necesitado, ha mostrado reflejos felinos y personalidad bajo presión, pero los mensajes desde el cuerpo técnico son fríos. Xabi Alonso apenas le ha dado minutos y, según fuentes cercanas al vestuario, el portero empieza a estar muy molesto con la situación. Incluso estaría valorando una salida si nada cambia en los próximos meses.
El ucraniano no entiende por qué, pese a su experiencia y compromiso, el club ha decidido mirar hacia otro lado. En Valdebebas, la dirección deportiva ha puesto sus ojos en Fran González, el joven del Castilla que viene de brillar en el Mundial Sub-20 con la selección española. Con solo 20 años, se le considera el heredero natural de Courtois, algo que ha terminado por frustrar a Lunin.
A Lunin se le agota la paciencia
Los informes internos del club sobre Fran González son espectaculares: madurez, serenidad, liderazgo y excelente juego con los pies. En el Madrid lo ven preparado para dar el salto al primer equipo. Y lo peor para Lunin es que Xabi Alonso también lo prefiere. El técnico valora especialmente la salida de balón del joven guardameta, algo que considera clave en su estilo de juego.
Ante este panorama, Lunin se siente apartado y sin opciones reales de ganarse el puesto. Florentino Pérez y los dirigentes blancos saben que su situación puede complicarse, porque el portero no quiere pasar otro año en el banquillo. Si llega una oferta interesante en verano, podría forzar su salida. En el entorno del jugador aseguran que se siente infravalorado y que su relación con el entrenador se ha enfriado notablemente.
En cambio, el Real Madrid ve en Fran González un proyecto de largo recorrido. Su rendimiento en el Castilla es impecable, con una regularidad y madurez impropias de su edad. En los despachos creen que, bajo la tutela de Courtois, puede convertirse en el futuro titular del equipo.
Así, el club tiene claro su plan. Pero el problema es que Lunin no está dispuesto a esperar más. Su enfado con Xabi Alonso es evidente, y si nada cambia, el Real Madrid podría perder a un portero con potencial por una decisión técnica que ha dejado heridas. Florentino Pérez tiene un nuevo caso sobre la mesa: un rebelde que ya no se siente parte del proyecto.