El futuro de Pau Víctor en el FC Barcelona ya está prácticamente decidido. A tan solo horas de que el primer equipo vuele a Japón para iniciar la gira asiática, el delantero se prepara para cerrar su traspaso al Sporting de Braga, un club que ha estado muy atento a su situación y que está dispuesto a pagar 12 millones de euros más 3 en variables por sus servicios. Una operación avalada por Hansi Flick y acelerada por Deco, que ve en este movimiento una oportunidad ideal para liberar espacio en la plantilla y hacer caja.
Pau Víctor, a Portugal
Pau Víctor no formará parte de la expedición azulgrana rumbo a Asia. El jugador ya lo tiene asumido y contempla con ilusión esta nueva etapa en su carrera. Después de una temporada con poco protagonismo en el primer equipo, y tras haber sido el máximo goleador del filial hace dos temporadas, Pau entiende que en el Barça no tendrá minutos suficientes y ha dado el visto bueno a su salida.

El acuerdo entre Barça y Braga es total. El conjunto portugués, que se prepara para disputar las fases previas de la Europa League, quiere cerrar cuanto antes el fichaje del delantero catalán y ya ha presentado una oferta formal. Además del montante económico —que podría alcanzar los 15 millones con variables—, el Barça se reserva un porcentaje sobre una futura venta, fórmula que viene utilizando con varios canteranos para mantener control sobre sus posibles explosiones lejos del Camp Nou.
El contrato de Pau Víctor con el SC Braga sería por cinco temporadas. En Portugal ven en él un proyecto a largo plazo y una punta de lanza con mucho potencial, que puede explotar en un contexto más favorable a su crecimiento.

El Valencia también mostró interés en Pau, pero solo contemplaba una cesión, opción que quedó descartada rápidamente por el entorno del jugador y el propio Barça. El club quiere avanzar en operaciones que impliquen traspasos definitivos con beneficios inmediatos y plusvalías futuras.
Este movimiento también tiene lectura interna: Flick ha dado luz verde a la salida, convencido de que Pau no tendrá protagonismo en su proyecto deportivo. Así, el Barça sigue afinando su plantilla y saneando sus cuentas con operaciones inteligentes, mientras da salida a jugadores con talento que no tienen hueco inmediato en el primer equipo.