Para el Real Madrid, no fichar a Kylian Mbappé sería una absoluta catástrofe. Fue imposible de cerrar su llegada el pasado verano, pese a las ofertas de 200 millones de euros que Florentino Pérez le presentó a Nasser Al-Khelaífi. El PSG se negó a vender y prefirió que el futbolista siguiera en París para intentar convencerlo durante su último año de contrato para renovar.
Mbappé lleva tiempo estudiando español
Pero pese a los infinitos intentos de su club para que se quede, con unas ofertas espectaculares y la concesión de todos sus deseos como beneficiarse del 100% de sus derechos de imagen, el futbolista francés parece decidido a cambiar de aires e irse a jugar de blanco en el Santiago Bernabéu.
Mbappé apunta al Real Madrid este verano / EFE
Y uno de los muchos gestos que hace pensar en ello es que sigue estudiando español, algo que va a favorecer y mucho a su adaptación al vestuario con sus compañeros. El francés ya sorprendió hablando español en una de las entrevistas que le hicieron tras el PSG 1-0 Madrid de la ida de los octavos de final de la Champions League, pero sigue sin saberse del todo el motivo de su buen nivel en el idioma
Algunos especulan con que hace algunos años, pensando en un posible fichaje por el Real Madrid en un futuro que ya parece haber llegado, empezó a tomar clases de español, y la gran cantidad de jugadores hispanoparlantes que ha tenido como compañeros en París también han puesto de su parte para que mejore su nivel. De hecho, cuando Kylian habla español, lo hace con un acento parecido al argentino.
Quiere ser uno más desde su llegada
Sea como sea su acento, que hable español pondrá más fácil una adaptación que ya se presupone sencilla por su insultante calidad. Este tipo de jugadores juegan bien donde sea, pero Mbappé no quiere dejar nada al azar. No quiere repetir los errores, por ejemplo, de Gareth Bale.
Mbappé celebra uno de sus goles con el PSG / Europa Press
El galés fichó por el Real Madrid en 2013 y casi una década más tarde sigue sin atreverse a hablar en español. Deportivamente ha rendido, hasta que ha dejado de hacerlo en las últimas temporadas, pero su falta de implicación y sus reticencias para adaptarse a aquello que hay fuera del césped le ha costado más de una crítica.
Mbappé no tendrá ese problema y Florentino Pérez ya sueña en el momento de su presentación, con el Santiago Bernabéu ya remodelado del todo, lleno para ver a su nueva figura, y Mbappé, con el 7 a la espalda, dirigiendo unas palabras en un español de Buenos Aires a su nueva afición.
Imagen principal: Florentino Pérez, presidente del Real Madrid / EFE